Recientemente salió a la luz una inédita carta en la que Albert Einstein predijo la capacidad de las aves para poder orientarse gracias a un sexto sentido.
Se trata de una misiva escrita en máquina por el científico y premio Nobel en 1949 y que iba dirigida a un ingeniero de radares de la Marina Real Británica llamado Ghyn Davys.
Según recogen medios especializados como Science Alert, la carta sería una respuesta a una pregunta planteada por Davys respecto a los métodos de percepción de ciertos animales.
“Es concebible que la investigación del comportamiento de las aves migratorias y de las palomas mensajeras pueda algún día conducir a la comprensión de algún proceso físico que aún no se conoce”, señaló Einstein en la carta.
Más de 70 años después, la actual evidencia sugiere que las aves pueden sentir el campo magnético de la Tierra usando fotorreceptores especiales en sus ojos que son sensibles a cambios sutiles en el campo magnético del planeta. De esta manera, pueden migrar miles de kilómetros sin perderse.
A su vez, en el documento Einstein cita al etólogo austriaco Karl von Frisch, quien poco antes había publicado su investigación sobre cómo las abejas podían orientarse con patrones de polarización de la luz.
“Es sorprendente que (Einstein) concibiera esta posibilidad, décadas antes de que la evidencia empírica revelara que varios animales pueden percibir campos magnéticos y utilizar dicha información para la navegación”, indicaron los investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén, donde la carta fue donada.
Por su parte, Adrian Dyer, profesor asociado de la Universidad RMIT en Melbourne, indicó mediante un comunicado que en su carta a Davys, Einstein también sugiere que “para que las abejas amplíen nuestro conocimiento de la física, sería necesario observar nuevos tipos de comportamiento”.
“Sorprendentemente, está claro a través de sus escritos que Einstein preveía que los nuevos descubrimientos podrían provenir del estudio de los comportamientos de los animales”, puntualizó.
