Cada vez es más común ver a amigos portando alcohol gel o desinfectantes para manos en sus mochilas y carteras. También es frecuente ver dispensadores de estos productos en tiendas comerciales, locales de venta de comida e incluso oficinas a lo largo del país.

Investigaciones realizadas en diferentes países y enfocadas al boom de su uso en hospitales, revelaron primero que estos desinfectantes a base de alcohol ayudaron a combatir las infecciones por estafilococos en pacientes y también fueron efectivos combatiendo ciertos tipos de bacterias resistentes a los medicamentos.

Sin embargo, tal como informó el medio NPR de EEUU, nuevos estudios afirman que no todas las infecciones en estos hospitales disminuyeron con su uso, por el contrario, ciertas infecciones tuvieron un alza.

Específicamente, las infecciones por enterococos, causadas por bacterias que afectan el tracto digestivo, la vejiga, el corazón y otras partes del cuerpo, comenzaron a aumentar.

A nivel mundial, los enterococos representan el diez por ciento de las infecciones bacterianas adquiridas en hospitales. En América del Norte y Europa, son una de las principales causas de sepsis, una infección de sangre mortal.

Conforme un nuevo estudio publicado por Science Translational Medicine, se cree haber encontrado la causa: el alcohol. Según la investigación se muestra que varias cepas de estas bacterias han comenzado a adaptarse a los desinfectantes para manos a base de alcohol. No son resistentes al alcohol, al menos todavía no, pero se están volviendo “más tolerantes”. Eso significa que las bacterias pudieron sobrevivir por períodos de tiempo más largos después de ser rociadas con alcohol.

Debe considerarse que por lo general, los desinfectantes de manos son 60 por ciento de alcohol.

Para empeorar las cosas, muchas de estas bacterias tolerantes al alcohol también son resistentes a múltiples drogas. La mitad de las cepas que estudiaron los investigadores no pueden tratarse con vancomicina, un antibiótico de última línea. Eso significa que las bacterias se están propagando más fácilmente dentro de los hospitales, y no hay muchas opciones para el tratamiento.

“Hasta donde sabemos, esta fue la primera vez que alguien mostró que las bacterias del hospital se volvían tolerantes a los alcoholes”, dice Timothy Stinear, coautor del estudio e investigador del Instituto Doherty de Infecciones e Inmunidad de la Universidad de Melbourne.

Primero, los investigadores compararon 139 tipos de bacterias, observando las mismas cepas durante un tramo de 19 años, desde 1997 hasta 2015. Con el paso del tiempo, las bacterias evolucionaron para tolerar mejor el alcohol. Para ser exactos, las bacterias recolectadas después de 2009 fueron 10 veces más tolerantes que las bacterias anteriores a 2004, lo que corresponde al impulso nacional para usar más desinfectantes de manos.

Pero las bacterias no siempre funcionan en su cuerpo como lo hacen en un laboratorio. Es arriesgado probar estas bacterias resistentes a los medicamentos en las personas, por lo que los investigadores recurrieron a las pruebas en ratones, una forma común de modelar cómo los humanos también podrían reaccionar. Los resultados fueron los mismos: las entrañas de los ratones mostraron rápidamente signos de bacterias tolerantes al alcohol, incluso cuando sus jaulas se limpiaron con una solución de alcohol.

La investigación aún recalca que los desinfectantes para manos a base de alcohol son más efectivos para combatir algunas bacterias, como las que causan infecciones por estafilococos. Sin embargo, este estudio indica que otras bacterias se limpian mejor con agua y jabón simple.