Que matan el 99,9% de los gérmenes o que son una buena forma de proteger a la familia, son algunas de las promesas que realizan las marcas que venden jabones antibacteriales.

Sin embargo, múltiples estudios y expertos han cuestionado los beneficios de estos productos e incluso han manifestado que su uso implica riesgos.

Por ejemplo, la prestigiosa científica de la Natural Resources Defense Council (NRDC) y profesora clínica asistente de medicina de la Universidad de California en San Francisco (EEUU), Gina Salomon, asegura que hay algunas razones para no usar jabón antibacteriano, basándose en diversos estudios científicos. A continuación te dejamos los motivos señalados por la especialista y otros recopilados por BioBioChile.

1. No es más efectivo que el jabón normal

Salomon dice que no son más efectivos que el jabón normal contra un virus como la gripe. Según un documento oficial del estado de Carolina del Norte y un estudio de la Universidad de Michigan, no existe evidencia contundente de que el uso de jabón antibacterial provea más beneficios que el jabón regular, en cuanto a la reducción de bacterias o a la disminución de infecciones.

2. Su principal componente sería riesgoso para la salud y el medio ambiente

Por otro lado, la profesional dice que contienen químicos como el triclosán o triclocarban -también presentes en pastas de dientes, desodorantes y otros-, los cuales son tóxicos para el ambiente, los animales e incluso los seres humanos. De acuerdo a una investigación de la Universidad de California en Davis y la Universidad de Colorado, se comprobó que este componente no sólo retarda el nado de los peces, y dificulta la contracción muscular de ratones, sino que también afectaría la función cardíaca. “A pesar de que el triclosán no está regulado como medicamento, este compuesto actúa como un potente depresor cardíaco en nuestros modelos”, señala Nipavan Chiamvimonvat, profesor de Medicina Cardiovascular de la U. de California, quien indica que pese a que los estudios fueron realizados con animales, las evidencias son contundentes como para tomar resguardos en la salud humana.

3. Podría provocar resistencia a antibióticos

El mismo estudio de la Universidad de Michigan mencionado en el primer punto, señala que el triclosán reacciona en las células, lo que puede causar que algunas bacterias se vuelvan resistentes a antibióticos de uso común, tales como la amoxicilina.

Conclusión respaldada por un artículo de la Comisión Europea, que indica que “algunas pruebas de laboratorio han demostrado que cuando se exponen al triclosán las bacterias pueden desarrollar resistencia genética, volviéndose resistentes a otros antimicrobianos, incluidos, en algunos casos, los antibióticos. Esta resistencia cruzada, si se produjera en la vida real, podría tener graves consecuencias para la salud pública”.

Tal como informó BioBioChile, Johnson & Johnson anunció en agosto de 2012 que quitaría una serie de químicos peligrosos de sus productos, entre ellos, el triclosán.