El ex Beatle ha optado por mantener un trato diferente con sus seguidores. “Siempre me ha parecido un poco extraño", comentó sobre las fotografías que le solicitan.

Una imperativa norma se autoimpuso Paul McCartney para su actual relación con los fans: no otorgar más autógrafos ni selfies al azar. Así lo reconoció durante una reciente entrevista, en la que explicó los motivos de la decisión.

“Siempre me ha parecido un poco extraño: ‘aquí, ¿puede escribir su nombre en la parte posterior de este recibo, por favor?’. ¿Por qué? Ambos sabemos quién soy”, comentó el ex Beatle en diálogo con Reader’s Digest.

Para el bajista, célebre y mundialmente famoso desde fines de los sesenta, el problema no es el contacto con su seguidores, sino en el modo en que ambos interactúan.

“Lo que normalmente tienes ahí es una foto retorcida con un fondo pobre y yo luciendo un poco miserable… Charlemos, intercambiemos historias”, emplazó McCartney, quien no es el único que ha optado por este método.

De acuerdo al portal Consequence of Sound, Ringo Starr, su ex compañero en The Beatles, desde 2008 tampoco regala selfies ni autógrafos, y tampoco recibe correspondencia de sus fans.

“Les advierto con paz y amor, tengo demasiado que hacer. Así que no más cartas de fans, gracias, gracias, y nada de objetos que firmar. Nada”, aclaró mediante un video publicado en redes sociales.

Por ahora, además del estreno del documental “The Beatles: Get Back” agendado para noviembre, McCartney alista el lanzamiento de “The Lyrics: 1956 to the Present”, libro que repasa en detalle las letras de sus canciones desde el inicio de su carrera. Sale a la venta el 2 de este mes.