Un Paul McCartney rejuvenecido es el protagonista del videoclip de la reversión de Beck para “Find My Way”, una de las canciones de “McCartney III”, el último álbum de estudio del británico hasta la fecha.

La canción es parte de “McCartney III Imagined”, disco donde el ex Beatle invitó a diversas estrellas de la música (Damon Albarn, Phoebe Bridgers, St. Vincent, Josh Homme, Anderson .Paak, entre otros) a reversionar las pistas de su más reciente lanzamiento.

El videoclip, que ya se convirtió en viral en redes sociales, fue dirigido por Andrew Donoho, y allí vemos al bajista en uno de sus looks más clásicos, cuando a mitad de los sesenta vestía un impecable traje negro y el cuarteto de Liverpool se alistaba a editar “Rubber Soul”.

La secuencia estuvo a cargo de la firma Hyperreal Digital. “La tecnología para reducir la edad de las estrellas y hacer que se desempeñen en entornos creativos como este, se realiza plenamente”, señaló el CEO de la empresa, Remington Scott, en declaraciones que recoge Consequence of Sound.

A medida que el avatar camina por los pasillos de un aparente hotel, McCartney baila y se contorsiona como un joven hiperactivo que “busca su camino” (tal como el título de la canción), en una secuencia derechamente psicodélica y colorida.

El desenlace del video guarda una sorpresiva aparición: tras convertirse en varios ases de luz y desaparecer en una de las puertas, el imberbe McCartney termina arrancándose la cara, quitándose una máscara, detrás de la que aparece un sonriente Beck.