La poetisa uruguaya Ida Vitale ganó este jueves el Premio Cervantes 2018, el galardón literario más prestigioso de las letras españolas, por su “destacado y reconocido” lenguaje y su trayectoria “de primer orden” que recibió múltiples reconocimientos recientemente.

A sus 94 años, la escritora montevideana corona con este galardón “una trayectoria poética, intelectual, crítica y traductora de primer orden”, según el acta del jurado leída por el ministro español de Cultura, José Guirao.

La premiada recibió la noticia mientras empezaba a regar las plantas de su departamento, sin “tener idea” de que al otro lado del océano Atlántico se le entregaba el considerado como el Nobel de las letras hispanas.

El premio ha sido una “sorpresa, e injustificado, un exceso de generosidad de España”, dijo Vitale a la AFP, que lamentó no poder compartir la alegría con su marido Enrique Fierro, poeta fallecido en 2016, uno de “esos escritores secretos”.

El jurado alabó especialmente el lenguaje de Vitale, “uno de los más destacados y reconocidos de la poesía moderna en español, que es al mismo tiempo intelectual y popular, universal y personal, transparente y honda”, explicó Guirao en una comparecencia en Madrid.

Unas cualidades que la convirtieron “desde hace tiempo en un referente fundamental para poetas de todas las generaciones en todos los rincones del español”, añadió durante el anuncio del premio, dotado con 125.000 euros (141.000 dólares).

Autora de más de una veintena de poemarios, como “La luz de esta memoria”, “Procura de lo imposible” o “Cada uno en su noche”, Vitale vive en su vejez una oleada de reconocimientos.

En 2015 se hizo con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana en 2015, un año después ganó el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca en 2016 y el 24 de noviembre recogerá en Guadalajara (México) el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances 2018.

“Nunca he esperado premios, es un desconcierto absoluto”, insistió a AFP.