Preocupación e indignación rondan por estas horas en las principales instituciones culturales de la Universidad de Chile, luego que desde el gobierno fuese confirmado un recorte presupuestario de 700 millones de pesos en desmedro de sus financiamientos.

Las cuatro dependencias que se verán afectadas serán la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile – próxima a cumplir 80 años–, el Ballet Nacional Chileno, el Coro Sinfónico (ambos con 75 años de vida) y la Camerata Vocal de la Universidad de Chile.

De acuerdo a la casa de estudios, la cifra se traduce en un 25%de los recursos que se destinan a los elencos, lo que compromete fuertemente su viabilidad y existencia. El monto, depende directamente del Ministerio de Educación.

“Además, pone en peligro el futuro de su misión, la que fue destinada por el Congreso Nacional hace 80 años mediante la Ley N°6696, dejando en jaque a estos conjuntos declarados Patrimonio Nacional que han sido actores esenciales en el desarrollo histórico y cultural del país”, se lee en un comunicado del Centro de Extensión Artística y Cultural (Ceac) de la universidad.

Ante la medida, el director del organismo, Diego Matte Palacios, ha expresado que “un recorte de esta magnitud significa un daño irreparable para la labor que se ha realizado por décadas en la entrega de contenidos artísticos de excelencia al país, siempre con una política de precios que ha asegurado un acceso democrático”.

“Vamos defender nuestro presupuesto entregando un mensaje claro a las autoridades y los ministerios involucrados. No podemos permitir que se destruya la institucionalidad cultural para que el Ministerio de Cultura obtenga aplausos fáciles engrosando artificialmente programas cortoplacistas”, añadió.

De acuerdo a lo indicado por la ministra Consuelo Valdés en Twitter, 2021 consideraría un incremento de un 13% para el sector cultural. Sin embargo, desde el Ceac denuncian que dicho anuncio se estaría realizando mediante una redistribución de fondos desde esa y otras carteras, incluyendo también recortes a otras instituciones culturales de larga trayectoria como el Teatro Municipal de Santiago, el GAM, la Fundación de Orquestas Juveniles y Balmaceda Arte Joven que, a diferencia del Ceac, se verían afectados con una rebaja del 10% de su presupuesto anual.

“Todos queremos que los fondos de cultura aumenten, pero es injustificable que esto vaya en desmedro de instituciones que han trabajado por décadas en favor del desarrollo cultural de nuestro país, y que con una medida de estas características podrían incluso ser destruidas. Trabajaremos incansablemente por defender nuestro trabajo, uniendo fuerzas y protegiendo nuestro patrimonio, como siempre lo hemos hecho a pesar de las circunstancias”, enfatizó Matte.

El recorte se suma a la difícil situación que han debido enfrentar el último año debido al cierre total del Teatro Universidad de Chile (ubicado frente a Plaza Italia, centro neurálgico de las manifestaciones capitalinas), primero producto del “estallido social” y luego a raíz de la pandemia, “lo que ha mantenido al organismo sin ingresos por un año completo”, aseguran.

Como una forma de visibilizar la amenaza que significa el recorte, los elencos están iniciando una campaña que tiene como propósito aunar esfuerzos por proteger a la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile, al Ballet Nacional Chileno, el Coro Sinfónico y la Camerata Vocal de la Universidad de Chile, mediante el lema “Defendamos la Sinfónica”.

A pesar de verse obligados a suspender sus actividades habituales producto de la pandemia, el Ceac y sus conjuntos no han cesado en sus esfuerzos por acercar la música y la danza a la ciudadanía.

Así, a lo largo de todos estos meses, desde el organismo han impulsado la plataforma online www.ceactv.cl, donde de manera abierta y gratuita se ofrecen contenidos artísticos y educativos.

“Defendamos la Sinfónica”