A pesar de estar hace meses radicada en Estados Unidos, Juanita Ringeling sigue atenta los acontecimientos que rodean al TPP-11 (Acuerdo Integral y Progresivo para Asociación Transpacífico), cuya última consulta ciudadana y digital (con 584.311 participantes) registró un 92,7% de rechazó ante la posibilidad que Chile se sume al tratado transnacional.
Mientras las atenuantes y agravantes del acuerdo continúan siendo materia de debate en el Congreso – donde el tema despierta viscerales posiciones a favor y en contra-, la actriz hizo un alto en su rutina en California para protagonizar una performance inspirada en la discusión.
Se trata de una sesión fotográfica a cuerpo pintado donde Ringeling ofrece su piel para elaborar un relato sobre los costos que tendría la firma del TPP-11 para Chile.
“Esta sesión fue un trabajo muy hermoso que hicimos en un estudio de arte en Los Angeles (California), y fue producido por Graham Sicalowski”, cuenta la intérprete a BioBioChile antes de compartir imágenes de su acción de arte, para la cual el estadounidense pintó su cuerpo completo durante cuatro horas.
“Juntos ideamos esta performance. Ocupamos el recurso de pintar mi cuerpo para que a través de la pintura y, de esta sesión, transformarla en una voz para contar la historia triste de un país que se regala por quedarse en silencio”, cuenta desde Estados Unidos.
Consultada por las motivaciones tras el proyecto, Ringeling habla a nombre del dúo: “Creemos que utilizar el arte es un buen vehículo para llamar la atención”, asegura. “Si bien Graham es estadounidense, yo le conté del TPP-11. De hecho, Estados Unidos estaba dentro del tratado y se retiró el año pasado”, cuenta .
En la sesión fotográfica la piel de Ringeling deja leer consignas contra el tratado, pero también grafica a una suerte de sobreviviente de la inclusión de Chile en el TPP-11.
La imagen más cruda la muestra con la cara ensangrentada, mirando a la cámara, en una pose que compartió en redes sociales con el siguiente manifiesto:
“Esta es la historia de un país que decidió regalar su soberanía. Año 2019, ellos se sentían modernos y empoderados. País líder en Latinoamérica. Privilegiados de estar al ‘fin del mundo’. Entre los #Andes y el #pacífico que resguardaban los tesoros maravillosos de su tierra y su gente. Convencidos de su grandeza, no sabían que caminaban ciegos hacia su segunda #colonia. 200 años de #independencia a la borda”, acota Ringeling.
Más abajo, continúa: “Y es que El #tpp11 va viento en popa. El imperio; feliz del silencio y desinformación de los chilenos. Espera que los políticos cierren el trato. Los diputados ya votaron para que Chile no pueda gobernarse a sí mismo. El Imperio fijará sus sueños y fronteras. El imperio definirá el desarrollo de su economía. El TPP11 regala #Chile y Chile no se da cuenta, entregan su tierra, sus semillas, su economía, sus sueños. Chile se convierte nuevamente en una colonia. Esta vez con cabeza impalpable. Este pueblo parece ciego, ese Chile prometedor se desmorona ante el silencio de su gente”.
