El alcalde de Pucón, Carlos Barra, dijo que urge una tercera pista en la Ruta Internacional para disminuir la congestión y mejorar las vías de evacuación ante emergencias. Aseguró que se lo solicitó a la presidenta Michelle Bachelet cuando visitó la zona por la erupción volcánica, pero que no ha tenido respuesta.

En el trayecto de 20 kilómetros desde Caburgua a Pucón durante la primera quincena de febrero, un automovilista puede demorar hasta 2 horas 30 minutos, cuando un traslado normal sólo debería durar 25 minutos.

El alcalde Carlos Barra señaló que durante la última erupción del Volcán Villarrica, cuando la presidenta Bachelet visitó la zona, expuso la necesidad de crear una tercera vía en la ruta internacional Francisco Valdés Subercaseaux, desde la rotonda hacia el sector de Puente El Turbio. Iniciativa que permitiría un tránsito más expedito en caso de emergencias y que en verano se eviten los largos tacos que molestan a residentes y turistas. Demanda que hasta la fecha no ha tenido respuesta.

Barra explicó que es necesario tomar decisiones políticas de parte del Estado para dar cumplimiento a los estudios del mejoramiento de la conectividad de Pucón, puesto que dicha comuna representa la oferta turística de Chile.

La autoridad comunal indicó que han insistido permanente al Ministerio de Obras Públicas para que solucione el problema. Sin embargo, aseguran no haber sido escuchados.

Un análisis que comparte la presidenta de la Asociación de Empresarios Turísticos, Jessica Fernández, quien explicó que los tacos están siendo el punto negro de este verano y calificó como impresentable que las personas se demoren más de dos horas desde Caburgua a Pucón o desde Villarrica a Pucón, puesto que deja a la comuna muy mal conceptuada.

El presidente del COSOC y director de la Cámara de Turismo, Roberto Nappe, sostuvo que el colapso de las vías se veía venir, por el desarrollo explosivo inmobiliario de los últimos años, comparado con la infraestructura vial que no ha sufrido ninguna mejora en los últimos 15 años.

Los dirigentes y empresarios turísticos evalúan hacer una mesa de trabajo una vez finalizada la temporada turística para, en conjunto, exigir al Gobierno dar una solución a esta problemática.