El hallazgo de osamentas movilizó a detectives de la Brigada de Homicidios de la PDI hasta el sector la Huella, distante a unos 20 kilómetros de Osorno en dirección a la costa. Según se informó, los restos fueron encontrados por un vecino que buscaba sus animales.

El subcomisario Hugo Leal explicó que se comprobó que se trataban de restos humanos, específicamente un cráneo y tres huesos, además de vestimentas que harían presumir se trataría de Luis Huenchullanca Marileo, de 88 años, quien se reportó como desaparecido el 18 de mayo.

En aquel momento se informó que el adulto mayor salió de su vivienda en dirección desconocida, perdiéndose su rastro, por lo que familiares, vecinos y las policías, como también agrupaciones, participaron de la búsqueda que no tuvo resultados positivos.

De acuerdo al inspector, la llamada la efectuaron los cercanos al hombre, ya que las vestimentas encontradas junto a las osamentas serían del adulto.

Si bien hay una identificación parcial, los restos humanos fueron remitidos al Servicio Médico Legal, ya que debe existir una prueba científica que permita determinar si se trata o no del mismo hombre, sin embargo, los exámenes pueden tardar algunos meses.

La ropa hallada y que habría permitido el primer reconocimiento, consta de un vestón, un chaleco y camisa que al minuto de ser levantados del sitio permitían observar que se encontraban hace bastante tiempo.

La zona donde fueron encontradas las osamentas corresponde a un sector boscoso a varios kilómetros del inmueble del desaparecido, al interior de un predio forestal, que si bien fue rastreado en un inicio, las agrestes condiciones impedían ingresar a zonas en particular.