En serios problemas está poniendo al Gobierno el seremi de Vivienda, Jaime Arévalo, al no conseguir que las familias de Aurora de Chile acepten el plan de radicación y erradicación que permita terminar el puente Bicentenario. La cartera ofrece un subsidio de 1.250 Unidades de Fomento, mientras que los vecinos exigen al menos 1.850 UF.

Fue categórica la decisión de la Junta de Vecinos del sector: los representantes de la Seremi de Vivienda no pueden volver a Aurora de Chile para exponer el Plan Maestro para el sector.

La decisión se debe a que la propuesta del seremi Jaime Arévalo se mantiene en una solución de 1.250 Unidades de Fomento para cada una de las más de 600 familias catastradas, lo que para algunos dirigentes -como Marco González- es insuficiente, poniendo como piso un subsidio de 1.850 UF.

Se debe señalar que hay un quiebre incluso al interior de la Junta de Vecinos, pues hay quienes están porque la mejor propuesta sea sólo para las 300 familias históricas de Aurora de Chile y no para las que han llegado últimamente al sector.

Pero no sólo un mejor subsidio están demandando los vecinos. Además de prácticamente rechazar la entrega de departamentos, muchos exigen casas con un mínimo de 80 metros cuadrados construidos, en un terreno de 150 metros, lo que es rechazado por Vivienda.

Además, las familias se dividen entre las que demandan la construcción de sus casas con esas caraterísticas en la misma población, otras que aceptarían que se les entregue el subsidio para buscar individualmente un inmueble en otro sector y quienes aceptan la erradicación a otra área de la ciudad.

Ante el quiebre entre la Junta de Vecinos y Vivienda, el seremi Jaime Arévalo organizó una reunión el martes fuera de la población con vecinos de la franja necesaria para reanudar la construcción del puente Bicentenario.

No obstante, fuentes del Gobierno Regional señalaron que se está analizando que la nueva directora del Serviu, María Luz Gajardo, asuma las negociaciones ante el escaso avance logrado por el seremi de Vivienda y permitir así que Obras Públicas pueda completar las obras del polémico viaducto.

Los dirigentes y vecinos de Aurora de Chile mantuvieron silencio al ser consultados por el complejo escenario, al igual que las autoridades con las que se intentó obtener una versión.