La futura alcaldesa de Madrid, la ex jueza Manuela Carmena, anunció que sus primeras medidas serán asegurarse que los niños coman bien y frenar los desahucios de viviendas en esta ciudad golpeada por la crisis.
Manuela Carmena afirmó que sus primeras decisiones irán dirigidas a los niños, algunos de los cuales en ocasiones carecen de productos básicos, en esta ciudad de tres millones de habitantes, donde el 16% de la población está desempleada.
Con las escuelas cerradas a partir de mediados de junio, la futura alcaldesa quiere que todos tengan comidas en verano. “Los colegios cierran ya y hemos intentado empezar a preparar raciones de comida que puedan servirse a todos los niños que lo necesiten de 0 a 13 años. Comidas y cenas para los que lo necesiten. Para nosotros tienen una importancia extraordinaria”, declaró.
La ex magistrada, de 71 años, precisó que también tomará pronto medidas para frenar los desahucios de particulares sobreendeudados, por medio de “mediaciones”, o encontrando soluciones habitacionales alternativas.
También Carmena se mostró emocionada ante la posibilidad de cambio en el gobierno municipal.
“Estamos con una cierta emoción ante la realidad de que, después de 25 años de gobierno municipal del Partido Popular (derecha), estamos enfrentando esa posibilidad de cambio”, declaró en una rueda de prensa en la que confirmó un acuerdo entre su lista de la plataforma ciudadana Ahora Madrid y el Partido Socialista, que le permitirá ser la próxima alcaldesa de la capital.
En virtud de este acuerdo, los nueve concejales socialistas votarán con los 20 ediles de Ahora Madrid en favor de la investidura de Manuela Carmena el sábado en el primer pleno municipal salido de la elecciones del 24 de mayo. Tendrán así una mayoría de 29 concejales de 57.
Por su parte, el candidato socialista, Antonio Miguel Carmona, confirmó su apoyo en esa misma conferencia de prensa. Según este acuerdo entre Ahora Madrid y el PSOE, el ayuntamiento de Madrid, que emplea a unos 20.000 funcionarios, deberá ser “transparente” en su gestión y luchar contra la corrupción.
A su vez pondrá en marcha procesos de participación ciudadana y especialmente “iniciativas legislativas populares”, la vivienda será un derecho, la administración “igualitaria” y se privilegiará el desarrollo sostenible.