En el Mes del Corazón, el presidente de la Sociedad Chilena de Enfermería en Cardiología y Cirugía Cardiovascular y docente de la Universidad Central, doctor Alex Montecinos, afirmó que para reducir el “riesgo de infartos una de las medidas fundamentales es la disminución de sal”.
“En Chile consumimos el doble de la recomendación que hace la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es 5 gramos al día. El consumo indiscriminado de sal genera una sobrecarga permanente al sistema cardiovascular, aumentando el riesgo de infarto”, precisó.
El doctor explicó que los hábitos para evitar afecciones a ese órgano se asocian esencialmente a fomentar los hábitos de estilo de vida saludable.
“Estos hábitos se pueden resumir en una tríada ideal: alimentación saludable, actividad física y lo que yo denomino ‘recreación saludable’”, puntualizó el experto.
Expresó también que otro factor es lograr una alimentación equilibrada, en cuanto a la cantidad de las porciones y la calidad de lo que comemos.
“La recomendación mundial señala que una dieta equilibrada debe aportar al menos un 20% de proteínas, 30% de grasa y entre un 50 a 55% de carbohidratos. El ajuste de las porciones y de los alimentos a incluir debe ser recomendado por un profesional nutricionista o nutriólogo, pues requiere de exámenes previos antes de iniciar”, explicó.
Para el docente, está demostrado que las dietas flash no son útiles y, en algunos casos, producen más aumento de peso que pérdida. En cuanto a la actividad física, ésta debe ser constante.
“El ejercicio express para bajar de peso resulta ineficaz e incluso riesgoso, pues el corazón también es un músculo y debe adaptarse paulatinamente a los ejercicios. Como su nombre lo indica, la ‘rutina de ejercicios’ es una actividad física diaria, idealmente 5 veces por semana, guiada por un profesional del deporte y con un chequeo médico antes de iniciarla”, aclaró el facultativo.
Respecto a la recreación saludable, ésta tiene relación con la capacidad que tenemos de sobrellevar el ritmo propio de la vida moderna en la que vivimos, “las escasas horas de sueño, la falta de tiempo, el consumo de drogas lícitas para ‘relajarnos’ como el cigarrillo, los tacos y las aglomeraciones, entre otros.
“En definitiva, el estrés de nuestra vida también somete diariamente a nuestro corazón y favorece la probabilidad de un Síndrome Coronario Agudo (SCA). Buscar alternativas de esparcimiento sano, por ejemplo, realizar una rutina de ejercicios ajustada a sus propios requerimientos y que sea un relajo dentro del día; tener un espacio de esparcimiento con la familia y con los amigos; reírse; tener una actitud positiva; darse espacios para hacer una pausa durante el día y dormir bien; sin lugar a dudas son situaciones favorables que mejoran la calidad de vida y que permiten mantener a raya la aparición del estrés y evitar afecciones cardiovasculares”, explicó el doctor Montecinos.