El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo este lunes que un acuerdo para evitar la crisis del precipicio fiscal que golpeará al país en pocas horas estaba a la vista pero todavía no era un hecho.

Este acuerdo “está a la vista, pero no está hecho todavía. Todavía hay problemas que resolver, pero esperamos que el Congreso pueda lograrlo”, mencionó el presidente Obama, adelantando que el trato comenzaría a solucionar los problemas presupuestarios y de déficit de Estados Unidos en varios pasos, en lugar del gran y exhaustivo acuerdo que él esperaba.

Obama no dio cifras detalladas sobre el acuerdo, que calificó solamente de “potencial”, aunque indicó que evitaría el aumento de impuestos a la clase media.

Este compromiso “no solo aseguraría que no se aumentarán los impuestos a la clase media, sino que también prolongaría los créditos fiscales para las familias con hijos”, afirmó.

Además, el acuerdo se traduciría en una extensión del seguro de desempleo “para dos millones de estadounidenses en búsqueda de trabajo”, agregó el presidente.

“Debo decir que desde que asumí el cargo, a lo largo de la campaña (presidencial) y en los dos últimos meses, yo hubiera preferido hacer frente a todos estos problemas en el contexto de un acuerdo más amplio, que resolvería nuestros problemas de déficit de una forma equilibrada y responsable “, lamentó el presidente.

Obama recordó que quería ocuparse de la cuestión “de los impuestos, pero también de los gastos de manera equitativa” para que Estados Unidos pueda superar la situación y concentrarse en el modo de hacer crecer a la economía.

“Pero con el Congreso, probablemente era esperar demasiado ahora”, dijo, en referencia a la conformación actual del Legislativo, donde la Cámara de Representantes está controlada por los republicanos. “Es posible que podamos hacerlo por etapas”, agregó.