España aseguró este domingo que cumplirá su promesa de reducir su déficit público a 3% del PIB en 2013, en un contexto de tensión en la Eurozona, la Comisión Europea y los mercados financieros por las perspectivas de recesión del país.

“Lo haremos”, dijo a la prensa el secretario de Estado para la Unión Europea, Íñigo Méndez de Vigo, al margen de una reunión informal de altos funcionarios europeos en Laponia, en el norte de Finlandia.

Méndez de Vigo rechazó los temores de muchos economistas que, ante la recesión prevista este año en España, creen que será incapaz de reducir su déficit público a 3% del PIB a fines del año próximo.

“Somos serios. España vuelve a ser seria”, dijo el secretario de Estado español, que se expresó en inglés.

El sábado, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, urgió a España a reducir su déficit advirtiéndole que de lo contrario los mercados financieros le exigirán mayores intereses para prestarle dinero.

El gobierno de Mariano Rajoy inquietó a sus socios recientemente al anunciar de un lado que el déficit español en 2011 fue muy superior al previsto, de 8,51% y no 6% como se anunció en un primer momento, y por otro que no podrá cumplir en 2012 su objetivo de reducir el déficit a 4,4%.

Finalmente, España se ha comprometido a reducir este año su déficit a 5,3%, y a 3% como máximo a fines de 2013, como estipula el Pacto de Estabilidad y Crecimiento europeo. Muchos economistas dudan de que esto sea posible, salvo si se aplica a España una cura de austeridad que acentuaría la recesión.

El primer ministro italiano, Mario Monti, también expresó el sábado “las inquietudes de la Unión Europea sobre España”.