Una melodía suave, cargada de instrumentos clásicos y un aire que hace sentirnos en las nubes. Por momentos se podría pensar que tal introducción se trata de una canción de una pieza de música clásica o incluso de Florence + The Machine, pero no. Es Lana del Rey.

En un principio su voz suena como la de una mujer desganada; cansada y áspera. Quizás pueda parecer atractiva e incluso sensual, pero al seguir la melodía continúa plana, pareja, como si a ella le molestara cantar. Suena “Video Games”, canción que de pronto tiene un ápice de querer salir del inicio, sin resultados positivos.

En general, el disco “Born to Die”, segundo EP de la artista y que tuvo 8 productores, no da señales de querer conducir la voz que de pop poco tiene, y que se aleja del principio del indie -estilo al que Lana del Rey dice pertenecer- ya que mágicamente la mujer apareció en el mapa, sin recorrer el difícil camino que los artistas de música independiente deben atravesar para llegar a un público masivo (el que ni siquiera es su objetivo).

De labios gruesos y cabellera rubia con ondas, su vestir gira en torno a lo vintage, con un estilo impecable, que la hace ver como una de las divas de la época de oro; como si fuera una “desencantada” dama de “alta sociedad”. Sin embargo su imagen no concuerda con lo que su música transmite. Está tan llena de “influencias” y sonidos peligrosamente similares, que no se sabe si en realidad tiene se presenta con una identidad propia o es otra cantante prefabricada.

Lana del rey gestó por años su carrera, tanto así que sus productores demoraron 5 años en elegir un nombre acorde al estilo que cultivaría.

Ella misma se hace llamar la “Nancy Sinatra Gángster”, una leyenda de la música a la que -francamente- no debería citar como referencia, más aún cuando declaró que sus principales inspiraciones son Kurt Cobain, Elvis Presley y… Britney Spears. Y de actitud gángster, poco agrega.

Elizabeth Woolridge Grant o Lana del Rey, es quizás la artista que marcará el nacimiento del “indie comercial”; música que suena alternativa, pero que en realidad es una mezcla heterogénea de sonidos ajenos, como pasa en algunas canciones de “Born to Die”, donde muchos de los acordes suenan a Amy Winehouse, Likke Li, Regina Spektor, Bat for Lashes, o Santogold, por sólo nombrar a algunos.

Si bien sus singles generaron gran expectación, la respuesta de algunos medios fue nefasta y aplastante tras el lanzamiento del disco, como en el caso de New York Times, que la comparó con “una niña cantando las canciones favoritas de su abuela”, o UK Independent, que la catalogó como “una especie de muñeca sexual que se autohumilla y se desliza hacia un mundo materialista y vacío”.

Sin embargo, no se puede negar que su repentina aparición ha tenido un éxito inmediato, siendo invitada a varios canales de televisión británicos y estadounidenses, además de ser parte de la campaña de impulso de artistas “Push”, de MTV, a fines de 2011 en Latinoamérica.

Una de sus últimas presentaciones fue en el popular programa “Saturday Night Live”, escenario donde no sólo cantó, sino que también desafinó e incluso no alcanzó algunos de sus característicos tonos en varias oportunidades.

http://www.youtube.com/watch?v=2I62I3r2f-8

http://www.youtube.com/watch?v=Bag1gUxuU0g