Air France-KLM registró le año pasado una pérdida neta de 809 millones de euros y una pérdida de explotación de 353 millones, por efecto de una coyuntura difícil y un aumento de 904 millones de la factura del carburante, anunció este jueves el grupo franco-holandés.

El transportista aéreo, cuyo volumen de negocios aumentó un 4,5% a 24.360 millones de euros, se ha fijado como objetivo estabilizar en 2012 su deuda neta en 6.500 millones de euros, precisa en un comunicado.

La factura de carburante, segundo volumen de gastos el año pasado, ascendía a finales de 2011 a 6.438 millones, es decir, un aumento del 16,3% en un año. Esta factura se prevé más cuantiosa aún en 2012: el grupo calcula un nuevo auge de 1.100 millones este año.

“En consecuencia, el resultado de explotación del primer semestre (2012) debería ser inferior al año pasado. En cambio, el segundo semestre debería reflejar el impacto positivo de las primeras medidas del plan (de economías) en tres años”, añade.

Por primera vez desde su creación en 2004, el grupo aéreo publica sus calendarios siguiendo un año natural.

En 2010, Air France-KLM tuvo un beneficio neto de 289 millones de euros y un beneficio de explotación de 28 millones, resultante de una plusvalía excepcional.