Un total de 300 familias de 4 comités de allegados de Tirúa se tomaron un terreno de comunidad mapuche con tiempo indefinido.

Más de 9 años llevan las familias luchando por la oportunidad de tener un sitio y dicen estar cansados del escaso apoyo de las autoridades y de vivir como allegados.

Después del terremoto, se unieron los damnificados a los comités. Es por ello que hace 4 días decidieron tomarse un terreno de 7 hectáreas, colindante a la zona urbana que pertenece a la comunidad mapuche “Colcuma”.

Fabricaron carpas y pequeñas mediaguas con los materiales que pudieron conseguir. Así lo planteó Álvaro Miller, de una de las agrupaciones.

David Navarro, vocero de la unión comunal de pobladores de Tirúa, manifestó que es una lucha de varios años. A raíz de movilizaciones anteriores lograron conformar mesas de trabajo y negociar con la delegación provincial del Serviu.

Cabe destacar que el Serviu asignó subsidios “para casas usadas” en Tirúa, pero de ese tipo no hay dónde cobrarlos en el lugar. Los vecinos señalaron que era necesario cambiarlos por “Construcción de nuevos territorios”.

A esto les responden que es complejo, y ellos lo saben, ya que casi un 50% de la comuna pertenece a las forestales, y el otro 50% a comunidades mapuche. Permutar o expropiar son las dos maneras que tienen para acceder a las tierras.

Durante la próxima semana debería realizarse una reunión entre el Serviu y las familias.