La ministra del Trabajo, Camila Merino, rectificó sus declaraciones acerca del conocimiento del Gobierno sobre los problemas de seguridad en el yacimiento San José.

La secretaria de Estado indicó que los indicios sólo llegaron tras el accidente y que de ninguna manera el Gobierno pudo haber manejado esa información.

Más temprano, la misma ministra había indicado que en el Ejecutivo se manejaban indicios de problemas de seguridad y que se debió actuar con anticipación, diciendo que es importante que las medidas que ahora se propondrán deben considerarse para evitar accidentes en el futuro.

Todo esto ocurre luego de que hoy se conociera una versión de que los mineros, a las 11 de la mañana del 5 de agosto, el día del derrumbe, avisaron de que la mina estaba con problemas, y no fueron autorizados a dejar el yacimiento por un representante de la empresa.