En su reunión mensual de política monetaria, el Consejo del Banco Central de Chile acordó mantener la tasa de interés de política monetaria en 0,50% anual.

En el ámbito externo, la elevada volatilidad en los mercados ha sido mitigada por los anuncios fiscales y de apoyo financiero en Europa. Las perspectivas de crecimiento global siguen siendo favorables, pero los efectos de las turbulencias financieras recientes sobre la actividad mundial son aún inciertos. Los precios del cobre y del petróleo han disminuido, pero se mantienen en niveles históricamente altos.

En el plano interno, la información disponible de actividad sugiere que los efectos inmediatos del terremoto fueron mayores que los previstos. Los indicadores de demanda, en tanto, muestran un dinamismo superior al contemplado en el Informe de marzo. Las condiciones crediticias han continuado normalizándose. El desempleo ha seguido disminuyendo.

En abril, el IPC tuvo un aumento algo menor que el previsto por el mercado y las expectativas privadas de inflación a plazos más largos son congruentes con el escenario base del IPoM.

El Consejo considera que se acerca el momento de iniciar el proceso de normalización de la política monetaria. Junto con ello, reitera que continuará usando sus políticas con flexibilidad para que la inflación proyectada se ubique en 3% en el horizonte de política.