Línea Azul anunció que inició una investigación interna sobre la adulteración de la patente del bus que volcó a en la Ruta 5 Sur el pasado lunes, accidente que dejó seis muertos y decenas de heridos. La compañía afirmó que continuará operando entre Concepción y Chillán, a pesar de la suspensión de sus servicios interurbanos decretada por el Ministerio de Transportes.

Después de casi una semana, finalmente la empresa Línea Azul se refirió al accidente del lunes pasado en el que murieron seis personas por el volcamiento de una máquina en la Ruta 5 Sur, a la altura de San Francisco de Mostazal.

En el texto difundido durante la mañana del domingo, la compañía indicó que abrió una indagatoria para conocer los “alcances y responsabilidades” en la adulteración de la patente del bus, que había sido cambiada por la de otra máquina dada de baja.

En el mismo escrito, confirmaron que, tras una disposición del Ministerio de Transportes, sus servicios interurbanos se mantienen suspendidos, no así los recorridos rurales que ofrecen. Uno de los trayectos que se puede calificar como rural es el entre Concepción y Chillán, ya que es menor a 200 kilómetros, por lo que este, al igual que otros, se mantiene.

Por otro lado, la compañía aseveró que su dueño, Marcelo Hernández, siempre tuvo la intención de enfrentar a las autoridades y la justicia, a pesar de que no se entregó, sino que fue detenido el jueves en virtud de una orden de aprehensión.

“Queremos manifestar que la disposición de Marcelo Hernández siempre fue la de colaborar. El jueves pasado, cuando la empresa tomó conocimiento de la orden de detención en su contra, el ánimo siempre fue de comparecer ante los tribunales”, expresó Línea Azul.

Según la versión, Hernández se había comunicado con la Fiscalía de O’Higgins para cooperar e incluso había informado de ello a la prensa local de Chillán, donde se encuentra establecida la compañía, antes de que fuera arrestado.

Archivo | Christian Borcoski (RBB)
Archivo | Christian Borcoski (RBB)

Junto con lo anterior, Línea Azul aseguró que la incautación de los 19 vehículos que Hernández tiene a su nombre fue una diligencia que contó con su autorización, a modo de reparar civilmente a las víctimas.

“Queremos reiterar nuestra entera cooperación con las diligencias que está efectuando tanto la policía como la Fiscalía de O’Higgins, además de solidarizar con las familias de las víctimas y de quienes resultaron heridos en este lamentable hecho”, concluyeron.

Abogado de víctimas apunta a Hernández

Pese a que en el comunicado Línea Azul afirmó que investigará la adulteración de la patente, el abogado Franklin Bustos, representante de los familiares de María Gatica Fuentes y su nieta de nueve años, dos de las víctimas fatales, cree que es prácticamente imposible que el dueño, Marcelo Hernández, no supiera de las ilegalidades en que se incurría para el funcionamiento de los buses.

“Siempre la responsabilidad va a recaer en el dueño, no sólo porque él sabía y él llevó a efecto todas estas clonaciones y malas prácticas, sino que además las aprobó de alguna forma. Por lo tanto, cualquier mando medio claramente actuaba con consentimiento de los dueños de la máquina, así que la ley los hace responsables a ambos”, comentó Bustos.

El abogado adelantó que se hará parte de la investigación del Ministerio Público a través de una querella en representación del viudo e hijo de María Gatica. Al respecto expresó que es alta la probabilidad de que los dueños de la empresa de transporte sean condenados a penas efectivas de cárcel.