La municipalidad de Punta Arenas mantiene una deuda que asciende a los 230 millones de pesos por concepto de electricidad y de 170 millones por concepto de gas, situación que hace peligrar el inicio del segundo semestre en 21 establecimientos municipales de la ciudad.
Los montos adeudados por la Corporación Municipal llevaron a que el miércoles ambos suministros fueran cortados en todos los recintos.
Tanto profesores, apoderados y alumnos se muestran preocupados debido a que las vacaciones de invierno se acaban este viernes, con el retorno a las aulas programado para el lunes 31.
Ésta es una historia larga, señaló el alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich (Renovación Nacional), la cual se vendría arrastrando hace años, y que él asumió su actual posición intuyendo el “forado financiero” que tenía la entidad.
Además, Radonich espera que el Gobierno les responda, dado que la actual administración llegará a su fin pronto y, a su juicio, la situación no puede “quedar a la deriva”.
Dado que un eventual truncado inicio de actividades afectaría a 11.500 alumnos, diversas han sido las tratativas realizadas hasta el momento por el jefe comunal, las cuales han incluido conversaciones con el Ministerio de Educación y el Gobierno Regional.
