En la presente jornada el subteniente de Gendarmería, Maikel Arriagada Bravo de 24 años, enfrentará la audiencia de control de la detención en el Juzgado de Garantía de Rancagua, tras ser detenido por la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, tras ser acusado de haber propinado una golpiza al reo Manuel Espinoza Maldonado, quien ayer iba a declarar por los maltratos que sufrió un grupo de internos en agosto de 2013, en la cárcel de la capital de O’Higgins.

El oficial de la institución carcelaria está acusado de obstrucción a la justicia y apremios ilegítimos contra el recluso que debía declarar ante la fiscalía en calidad de víctima.

De acuerdo a las informaciones, en forma previa el interno fue golpeado en al menos cinco oportunidades con un bastón por parte de Arriagada, para amedrentarlo por sus declaraciones.

Entre tanto, la institución trasladó -a eso de las 15:30 horas- al Ministerio Público a su hermano, quien también está recluido en el penal rancagüino, y el personal señaló que hubo un “error” en el procedimiento de identificación del interno, lo que despertó las sospechas del fiscal Carlos Fuentes, que indaga el caso.

Posteriormente, un grupo de fiscales concurrió a la cárcel, donde quedó al descubierto la golpiza al recluso. Frente a este hecho de violencia la Dirección Nacional de Gendarmería anunció la intervención del penal, por lo que personal de Santiago llegaría al recinto.

El subteniente fue arrestado cuando subía a un bus con destino a Talca y hoy se resolverá su situación judicial.