Mucha gente, sobre todo las mujeres, tienen pánico a conducir un vehículo, incluso a subirse en uno. La fobia que agrupa estos miedos se denomina en términos médicos, “Amaxofobia”.

Conducir un auto es una actividad psicomotriz compleja influenciada por las emociones, esto quiere decir que se debe conocer la reacción que una persona tendría en diferentes situaciones que se presenten mientras se maneja.

Entre dichas emociones, el miedo es uno de los más comunes, ya que es una sensación de angustia provocada por un peligro que muchas veces es imaginario. Ahora, cuando este temor impide que la persona ejecute de manera óptima la acción de conducir, se le denomina amaxofobia, palabra derivada del griego “amaxo”: carruaje y de “fobia”: miedo.

Puntualmente, y como lo define la Real Academia Española, RAE, la amaxofobia es el temor patológico a conducir un vehículo o viajar en él.

Según explica el sitio ABC.es, los síntomas de este trastorno son: el miedo a tomar una curva, a adelantar un auto, a circular por una autopista o por cualquier espacio en el que resulte medianamente complicado detenerse.

Sin embargo, no se debe confundir la amaxofobia con inseguridad al volante. La inseguridad se debe a la falta de habilidad al conducir y, en la mayoría de los casos, esta falta de destreza se produce por la poca experiencia o porque ha pasado mucho tiempo sin conducir.

Esta patología es más frecuente en mujeres, sobre todo en aquellas con padres, hermanos o maridos muy dominantes o machistas que han mermado su autoestima.

De acuerdo a lo señalado por el sitio Yahoo Mujer, el Instituto Mapfre de Seguridad Vial publicó el primer estudio sobre la amaxofobia desde una óptica científica. Entre algunas de las conclusiones a las que llegaron se pueden citar:

- Esta fobia afecta más a mujeres que a hombres; el porcentaje de mujeres es casi el doble que el de hombres.
- Un 33% de la población sufre sensaciones de ansiedad y angustia, antes y durante la acción de manejar.
- La edad promedio de las mujeres para empezar a padecer esta fobia es de 48 años, mientras que la de los hombres es de 60 años.
- Ante el miedo a conducir, las personas que padecen esta fobia optan por usar el transporte público o buscar quien las lleve.
- En el caso de las mujeres, el padecimiento de esta fobia puede ir ligado a experiencias vividas con familiares que afectaron su autoestima. Padres o maridos muy dominantes, que durante sus primeras experiencias al manejar les provocaron estrés o ansiedad.

Es importante mencionar que la amaxofobia se puede superar, lo que sí, hay que tener presente que se trata de una fobia vinculada a un hecho en el que existe un riesgo real, el tráfico es peligroso, por lo que curarse requiere su tiempo, no es una recuperación rápida, así lo afirmó a ABC.es el psicólogo clínico, Javier Díaz Calero.