La secta radical islamista Boko Haram dio un ultimátum de tres días para que los cristianos que viven en el norte de Nigeria se vayan de esa región mayoritariamente musulmana, y prometió resistir a las tropas gubernamentales encargadas de aplicar el estado de emergencia.

Un vocero del grupo, Abul Qaqa, dijo que Boko Haram “ha dado un ultimátum de tres días para que los cristianos se retiren del norte de Nigeria”.

El mismo dirigente, hablando en lengua hausa, utilizada en el norte del país, añadió que el grupo también formuló un llamado “a los hermanos musulmanes del sur (región mayoritariamente cristiana) para que vengan al Norte, porque tenemos pruebas de que han sido atacados”.

El presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, decretó el fin de semana el estado de urgencia en varias zonas del país, después de que los ataques realizados por esa secta dejaran centenas de muertos, incluyendo una matanza de 50 personas en la noche de Navidad.

“Nos parece oportuno destacar que los soldados matan únicamente a musulmanes en las zonas gubernamentales donde se decretó el estado de urgencia”, dijo Qaqa a periodistas.

Por ello, Boko Haram está dispuesto a enfrentarse a los soldados gubernamentales “para proteger a nuestros hermanos”.

El vocero criticó también la visita que el presidente Jonathan realizó el sábado a una iglesia católica en la periferia de Abuya, donde se produjo el ataque que mató a varias decenas de personas el 25 de diciembre.

“El presidente no ha ido nunca a visitar los lugares donde han muerto musulmanes”, dijo.

Obispos católicos han apelado al presidente nigeriano para que pida ayuda de expertos extranjeros en soporte a las fuerzas de seguridad en su lucha contra Boko Haram.

La comunidad cristiana nigeriana incluso amenazó recurrir a la autodefensa si la violencia continúa en un país dividido entre un norte pobre y predominantemente musulmán, y un sur más rico, mayoritariamente cristiano y animista.