La fiscalía presentó diversas pruebas en la audiencia de formalización para formalizar a los cinco jóvenes imputados por el ataque registrado en noviembre pasado en el cuartel de la Brigada de Homicidios de la PDI en Providencia.

Dentro de los elementos considerados como claves por el Ministerio Público están las huellas dactilares obtenidas desde las bolsas con ropa anticorrosiva usadas por los imputados; las muestras de ADN obtenidas de las ropas que dejaron en el lugar de los hechos; y los registros de las cámaras de seguridad que permitieron identificar que dentro de los imputados participaban dos mujeres.

A esos elementos se añaden los tráficos de llamadas, que posicionan a los imputados en las cercanías del cuartel policial cuando se registraron los hechos, las declaraciones de más de 70 testigos.

A su vez dos de los imputados presentaban una detención conjunta por el delito de robo y durante la detención de uno de los imputados se encontró en su habitación una bomba lacrimógena de similares características a las empleadas el día del atentado.

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Al respecto, el fiscal regional Metropolitano Oriente, Alberto Ayala, destacó que la indagatoria se realizó bajo estricta reserva por la fiscalía y la Unidad de Fuerza de Tarea de Delitos Complejos de la Policía de la PDI, “logrando llegar a la identificación de cinco personas gracias a una investigación meticulosa y que cumple elevados estándares jurídicos”, subrayó.

Francisco Castillo | Agencia UNO

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