Todos los años es la misma historia: a medida que se acerca el periodo de exámenes, las instituciones de educación superior reciben un creciente número de llamados que alertan la supuesta presencia de una bomba en sus instalaciones.

Tras ello, se sigue el protocolo de evacuación mientras Carabineros realiza la revisión de rigor del recinto, operación que -por mera coincidencia- suele tomar el tiempo suficiente para que la evaluación deba ser reprogramada.

Sin embargo en la Universidad Austral de Chile, ante la verdadera oleada de llamados que han recibido en las últimas semanas, decidieron tomar una medida radical para evitar que se siga recurriendo a argucias con el fin de evadir responsabilidades.

Así, este lunes su vicerrectoría académica anunció que los alumnos que se encuentren realizando una evaluación, deberán permanecer en sus salas de clases ante un aviso de bomba, permitiendo a Carabineros realizar el chequeo con ellos en el lugar.

“El personal del GOPE revisará las dependencias con ellos en el lugar. Los académicos a cargo de la evaluación otorgarán las facilidades que Carabineros necesite para tal efecto”, informaron las autoridades mediante un comunicado en el sitio web de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UACh.

“Todo el resto del alumnado, académicos y funcionarios deberán, de acuerdo al procedimiento establecido, evacuar a las zonas de seguridad definidas para ello, sin abandonar el campus universitario, hasta que la revisión sea terminada”, concluye.

Aunque los alumnos se declararon sorprendidos por la medida, esta parece responder a la molestia de muchos de los propios estudiantes y académicos, quienes manifestaron en redes sociales su enojo ante la continua utilización del recurso para anular las evaluaciones.