El movimiento de los indignados anunció este jueves haber presentado una denuncia ante la justicia contra la antigua dirección de Bankia, cuyo rescate histórico de 23.500 millones de euros ha precipitado el acuerdo para un plan de ayuda europea al sector bancario español.

“Queremos mostrar que la impunidad se ha acabado”, dijeron unos portavoces del movimiento durante una rueda de prensa en Madrid, insistiendo en que “los responsables tienen que ir todos a la cárcel”.

La denuncia de los indignados, interpuesta en nombre de 13 accionistas, apunta al expresidente de Bankia, Rodrigo Rato, y a los antiguos miembros del consejo de administración por “falsedad contable” y “estafa mercantil”, explicó el abogado, Juan Moreno Yagüe.

De acuerdo con los artículos 282bis, 290 y 295 del código penal, podrían ser condenados a penas de “uno a seis años de prisión”, añadió.

El nuevo presidente del banco, José Ignacio Goirigolzarri, reconoció “errores” en la creación del banco; nacido de la fusión de siete cajas de ahorros y su entrada en bolsa en julio de 2011.

Desde entonces, el banco ha revisado sus cuentas y reconocido unas pérdidas de 2.979 millones de euros, tras haber publicado primero unos beneficios de 309 millones de euros. La acción ha perdido desde entonces más de dos tercios de su valor.

Se trata de la cuarta denuncia contra Bankia, tras las presentadas por el sindicato Manos Limpias, considerado de extrema derecha, el partido UPyD y una facción del movimiento Democracia Real Ya.

La fiscalía anticorrupción también ha abierto una investigación preliminar para comprobar si se hubiera podido cometer algún tipo de delito en la creación de Bankia y su introducción en bolsa.

Bankia anunció este miércoles que Rato había renunciado a su indemnización de 1,2 millones de euros prevista en su contrato, cuyo cobro le hubiera impedido trabajar en una entidad financiera en los próximos dos años.