Una nueva operación militar iraní contra un movimiento independentista armado kurdo de Irán, el PJAK, causó la muerte de 22 personas, indicó este lunes la televisión de Estado.

Veintisiete combatientes más del PJAK murieron en estas operaciones lanzadas el viernes en las montañas de Sardasht, agregó la televisión.

Los Guardianes de la Revolución anunciaron el sábado que las fuerzas iraníes habían reanudado sus operaciones contra los rebeldes kurdos en la zona fronteriza con el Kurdistán iraquí, asestándoles “duros golpes”, sin precisar si se había efectuado alguna en territorio iraquí.

En julio pasado, Irán había lanzado de su lado de la frontera, pero también en territorio kurdo iraquí, operaciones que le habrían permitido destruir varias bases rebeldes, tres de ellas en territorio iraquí, y matar a decenas de combatientes del PJAK, considerado el principal movimiento independentista armado kurdo iraní por Teherán.

Responsables locales del Kurdistán iraquí anunciaron el sábado un reinicio de los bombardeos iraníes en territorio iraquí, dando cuenta de la muerte de un pastor y de la destrucción de casas.

En julio, Bagdad había conminado a Irán a cesar dichos bombardeos, pero los Guardianes de la Revolución afirmaron que las operaciones contra el PJAK continuarían hasta que Irak desplegara sus fuerzas a lo largo de la frontera para impedir la infiltración de rebeldes.

El PJAK (Partido por una vida libre del Kurdistán), vinculado al movimiento independentista armado kurdo de Turquía PKK (Partido de los trabajadores del Kurdistán), está regularmente implicado en enfrentamientos armados con las fuerzas iraníes.

Teherán bombardea en represalia las zonas fronterizas montañosas del Kurdistán iraquí, desde donde operan los combatientes independentistas.