La red social Instagram no sólo sirve para compartir fotos cotidianas, para muchos se ha transformado en una plataforma para exhibir sus productos, talentos y habilidades, y de paso influir en el círculo de seguidores.
Aunque esta comunidad virtual se asocia más a la gente joven, hay personajes como la estadounidense de 89 años, Baddie Winkle, que cautiva con sus colores y jovialidad; o Icon Accidental, una profesora neoyorquina de 64 años que -como dice su nombre- accidentalmente se convirtió en ícono de moda. Ambas se han transformado en verdaderas “influencer”, logrando contratos con marcas para promocionar sus productos.
Pero si creías que sólo las abuelitas norteamericanas se atrevieron a entrar a este mundo tan millennial, estás equivocado.
Una chilena de 82 años, llamada Sonia Muñoz -pero más conocida como “Ayita” por sus cercanos- se ha ganado rápidamente el cariño de la gente en esta red social.
Bajo el nombre de “La Tortuga Tejedora” y con la ayuda de su nieta Camila Woldarsky (@labusquilla en Instagram), creó su cuenta en la plataforma donde enseña a tejer a sus seguidores.
“Dicen que parezco una tortuguita galápago, por eso algunos me llaman Tortuga. Tengo 82 años (pero me siento de 50) y me encanta tejer, cocinar, hacer bisutería”, dice su primer post.
“Comencé a tejer a los 9 años y a los 11 años me hice mi primer chaleco completo. Aprendí mirando a mi madre y a gente que tejía. Lo que no sabía hacer, preguntaba, y con la vida comencé a crecer como tejedora”, añadió.
Entre otras cosas, también contó que se casó a los 17 años y que a los 21 ya tenía 2 hijos, actualmente tiene 3. “Después que me casé hice un curso de alta costura e instalé un taller con 7 operarias”, complementó.
“También sé cocinar, ya que mi mamá tuvo un restaurant en el Sur, mi especialidad es la comida casera”, contó.
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En apenas un par de días, “Ayita” ya cuenta con casi 2.000 seguidores, muchos comentarios y seguidores que le agradecen por compartir sus conocimientos sobre el tejido.