La influencer y bloguera norteamericana Jordan Cheyenne se encuentra en el ojo del huracán, luego de haber subido por error un video donde obliga a llorar para las cámaras a su hijo de nueve años.

Debido a la ola de comentarios y críticas, la también youtuber -que se autodenomina creadora de contenidos de belleza y estilo de vida- cerró su canal de Youtube.

El clip que ya es viral, fue subido bajo el título “Estamos con el corazón roto” y supuestamente se dedicaría a la hospitalización del perro de la familia, que se encontraban con parvovirus.

Y aunque al principio parecía un video normal, hacia el final de este, se le ve dando instrucciones a su hijo para llorar y sobre cuál era la mejor pose para la cámara.

“Actúa como si estuvieses llorando”, le dice al pequeño, quien replica: “Pero si estoy llorando, mamá”.

“No debería haber hecho eso”

Cheyenne tiene más de 537.000 suscriptores, donde muestra parte de su vida como madre soltera y entrega consejos.

Tras la polémica y las críticas, ella se defendió en otro video. “Al final del video, estaba tan agotada emocionalmente… tenía a mi hijo en mi hombro y estaba como ‘ven a posar para la miniatura conmigo"”, reconoció. “No debería haber hecho eso”, agregó.

“Ojalá hubiese podido mostrarnos en el veterinario llorando y afectados con todo lo que pasó. Pero si hacía eso, ya sabemos lo que dirá la gente. ‘¿Por qué estás filmando a tu hijo llorando? ¿Por qué estás filmando un momento tan emocional?’”, explicó.

Adiós redes

En Instagram más tarde aseguró que su hijo estaba “completamente bien”, pero que ella misma estaba “en estado de shock por haberme permitido llegar a ese nivel”.

“Estoy absolutamente genuinamente horrorizada y disgustada conmigo misma por haber llegado a un lugar donde hice que mi hijo posara conmigo para una foto miniatura, en un momento tan emocional en lugar de priorizar su salud mental”, afirmó.

“Estoy horrorizada, tan decepcionado de mí misma que ni siquiera puedo decirlo. No está bien, está mal en muchos niveles. Él no estará en mi contenido ahora en adelante. Estoy replanteando completamente qué hacer para el futuro”, aseguró.

La mujer, más tarde, agregó que se tomaría un tiempo lejos de las redes sociales, pues había recibido “amenazas de muerte y cosas sobre mi hijo que están tan por encima del nivel de acoso y ciberacoso”.

“Lo único que me importa es desconectarme por completo, cancelar todos los videos y la monetización, y priorizar a mi hijo. Estoy disgustada y horrorizada por lo que hice y no hay absolutamente ninguna excusa. Es terrible en muchos niveles. Amo a mi hijo más que a nada y lamentaré este momento para siempre”, cerró, antes de bajar su canal.