Hace más de 500 años que la cochinilla, un insecto que habita en los cactus, se utiliza como uno de los principales ingredientes para obtener ese rojo espectacular que muchos desean. Aunque no es solo la industria cosmética la que lo aprovecha.
Desde el principio de las civilizaciones, el lápiz labial tiene protagonismo en la vida de las personas. Como signo de sensualidad, coquetería y glamour, es uno de los maquillajes más utilizados en el mundo y con más historia.
Sin dudas, el labial rojo es el más cotizado y así lo han plasmado icónicas celebridades como Marilyn Monroe, Elizabeth Taylor, Madonna o Angelina Jolie e incluso Cleopatra, que en su época usaba un particular polvo para pintar sus labios.
Sin embargo, lo que pocos saben es que uno de los componentes principales de los labiales rojos es un insecto, desde donde sale el color que brinda ese tono intenso.
Ese insecto no está solo en los lápices labiales, sino que en una serie de cosas que te sorprenderán.
Una historia que comenzó mucho antes del lápiz labial
¿Cómo es que un insecto como la cochinilla llega a ser parte del lápiz labial que llevas en la cartera? Esto tiene una historia que se remonta a más de 500 años.
La obsesión por encontrar el color rojo para teñir prendas u objetos es desde hace muchos años, sin embargo, todo cambió en el siglo XVI.
Hernán Cortés, un militar español, viajó a América y llegó a un territorio que ahora es México, desde donde extrajo oro, plata y un particular tinte que producía un rojo intenso que no era conocido en Europa.
Cortés llevó este tinte que podía imitar el color de la sangre a España, terminando con el calvario de quienes buscaban obtener el tono a través de plantas u otros elementos y que solo se habían acercado con el insecto “Sangre de San Juan” y el rojo armenio.
El problema era la escasez de esa materia prima y la producción laboriosa, según recoge Yahoo!.
El tinte que llevó Cortés a Europa era “diez veces más potente que la sangre de San Juan y producía 30 veces más tinte por onza que el rojo armenio”, mencionó la historiadora Amy Butler Greenfield en su libro “Un rojo perfecto”.
Se trataba de un colorante rojo carmesí que provenía de la cochinilla, un insecto al que no se le ven las patas o las antenas y que los mesoamericanos habían descubierto hace miles de años.
Esto porque al pellizcar a las cochinillas que se albergaban en cactus sus dedos quedaban machados con un color rojo parecido a la sangre, a partir de ese momento las comenzaron a criar para obtener el ácido carmínico que tienen en su cuerpo y que genera el tinte que se exporta a todo el mundo.
Un tinte en diversas industrias
Un cuarto del peso de una cochinilla hembra, perteneciente a la familia Dactylopiidae, es solo ácido carmínico que da origen al carmín, ese rojo espectacular que muchos buscan y que es uno de los favoritos en los lápices labiales de la industria cosmética.
Y aunque luego de ver imágenes te pueda resultar repugnante que algo de este “bicho” llegue a tus labios, te contamos que el carmín de este insecto no solo se aplica a la industria cosmética, sino que también lo encuentras en una gran parte de los productos que consumes.
De acuerdo a BBC, es uno de los colorantes más usados en la industria alimenticia y lo añaden a muchos productos como el yogur, helados, bebidas y donas.
Una de las cualidades que lo hace tan preciado es que es un aditivo estable, de larga duración y su color no se ve afectado por el calor o la luz. No por nada lleva más de 500 años en el mercado.
Según comenta La Vanguardia, “desde el año 2016, la cochinilla de Canarias, es el primer tinte natural del mundo que ostenta el sello de calidad de la Denominación de Origen Protegida que concede la Unión Europea”.
¿Cómo la cochinilla llega al labial?
Un viral de TikTok mostró a muchos usuarios a través de un video en dueto cómo las cochinillas pasan de ser un simple insecto pegado a un cactus a un colorante que podría llegar a tu lápiz labial.
La usuaria Ally Viamalama muestra el proceso desde que los toman de la planta y los secan. Luego los hierven y aplastan hasta crear un polvo que lleva el color rojizo de la cochinilla.
@ally_viamalama #duet with @❤️❤️❤️ #CapCut ♬ Love You So – The King Khan & BBQ Show
La joven muestra con asombro cómo incluso los baten en una batidora para lograr obtener la pasta final que lleva, literalmente, insectos cocidos.
En ese sentido, la chica menciona que prefiere llevar labiales veganos que no contengan insectos.
El proceso puede ser más duro de digerir cuando descubres que para hacer 5 gramos de este tinte deben matar al menos 70 mil cochinillas.
La posición de Peta.
En 2017, PETA, la organización en favor de los derechos de los animales, manifestó su preocupación por el uso continuo del carmín de las cochinillas en la industria cosmética.
“¿Alguna vez te preguntaste cómo tu maquillaje obtiene su pigmento?… Podrías untarte el interior de miles de insectos en tus labios con tu lápiz labial rojo favorito o en tus mejillas con tu rubor favorito”.
De esta manera, la organización llamó a que los consumidores notaran qué ingredientes están en su maquillaje, pero también en varios de sus productos favoritos.
Invitaron a los consumidores a busca en sus productos favoritos el ingrediente “CI 75470”, “Extracto de cochinilla”, “rojo natural 4” o “carmín” para que descubrieran que cientos de cosas llevan la cochinilla.
Sin embargo, antes de asustar a sus seguidores, PETA los instó a no estresarse en caso de que tuvieran maquillaje que contuviera este ingrediente, pero sí ayudar a que los animales reduzcan su sufrimiento y evitar explotarlos.
Para esto recomendaron marcas de cosmética que poseen productos que sean veganos como Face It Natural Cosmetics , Urban Decay, KVD Beauty, Fairy Girl entre otras marcas.
De igual forma, instaron a que privilegien colorantes veganos en los alimentos que consumen.
