Hace algunos días, medios italianos dieron a conocer la historia de una pareja de “terraplanistas” (personas que defienden la idea que la Tierra es plana), quienes se embarcaron para descubrir el fin del mundo en el mar. Lo cierto es que sus esfuerzos fueron en vano y debieron ser rescatados al borde de la muerte.

Si bien la situación ocurrió en abril pasado, en medio del confinamiento por la pandemia en Italia, el médico de la oficina de sanidad marítima Salvatore Zichichi, que los atendió en ese entonces, contó los detalles al diario Correo.

En este sentido, Zichichi indicó que las dos personas eran oriundas de Venecia y tenían la fuerte convicción de que en algún punto del mar Mediterráneo el mundo acababa.

Por algún motivo, la pareja pensó que esto ocurriría en las cercanías de la isla italiana de Lampedusa, por lo que iniciaron un viaje en una embarcación pequeña hacia el lugar, saltándose todas las medidas sanitarias.

No obstante, señala el médico, la travesía duró poco más de tres días, cuando ambos fueron rescatados en las cercanías de la isla de Ústica, cercana a la ciudad de Palermo, donde estaban sin alimentos, sedientos y cerca de naufragar.

AFP

“La cosa divertida es que se orientaban con una brújula, un instrumento que funciona sobre la base del magnetismo terrestre, un principio que ellos, que son terraplanistas, deberían rechazar”, sostuvo.

En concreto, la pareja no dirigió el viaje hacia el sur del Mediterráneo, por lo que perdieron el rumbo y terminaron en la isla antes mencionada. Tras ser rescatados debieron iniciar una cuarentena de 14 días por protocolos de COVID-19, de la cual intentaron escapar.

En ese entonces fueron detenidos por personal de la policía, quienes los devolvieron hasta un centro médico en Palermo, pero otra vez se quisieron fugar del lugar.

“Pocos días después intentaron escaparse de nuevo y acabaron en casa de un mitómano que aseguraba ser positivo a la COVID-19, aunque afortunadamente no lo era”, contó.

Después de eso, ambos fueron llevados hasta un penal de seguridad hasta que se levantaron las medidas de confinamiento en el país y pudieron volver hasta Venecia. “Nada más se supo de ellos”, confesó Zichichi.