Este miércoles 22 de julio se conmemora el Día Mundial del Cerebro, fecha cuyo objetivo es generar conciencia sobre los cuidados de este vital órgano así como también sobre las silenciosas enfermedades que pueden deteriorarlo.
Se trata de una fecha impulsada desde 2014 por la La Federación Mundial de Neurología (World Federation of Neurology).
Para este año se decidió centrar el foco en el mal de Parkinson y sobre cómo poder mejorar la calidad de vida de quienes padecen esta enfermedad neurológica.
“El objetivo de este día es crear conciencia sobre la enfermedad de Parkinson y su impacto en la sociedad, pero también para que, en todo el mundo, se haga un esfuerzo por reconocer los síntomas del Parkinson de una forma precoz, así como a mejorar el acceso a la atención neurológica de calidad y los tratamientos de los que disponemos en la actualidad”, señaló el Dr. Pablo Mir, Coordinador del Grupo de Estudio de Trastornos del Movimiento de la Sociedad Española de Neurología, en conversación con el portal Discapnet.
“Porque pesar de que el diagnóstico temprano y el acceso a un tratamiento efectivo son vitales para ayudar a los pacientes a mejorar su calidad de vida, más de un 25% de las personas que padecen la enfermedad de Parkinson en todo el mundo fueron inicialmente diagnosticadas erróneamente y muchos síntomas de la enfermedad de Parkinson aún son poco reconocidos y no se tratan adecuadamente”, agregó.
Según el sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la enfermedad de Parkinson es un tipo de trastorno del movimiento que ocurre cuando las células nerviosas (neuronas) no producen suficiente cantidad de una sustancia química importante en el cerebro conocida como dopamina.
El citado portal añade que, generalmente, los síntomas comienzan lentamente en un lado del cuerpo, aunque luego afectan ambos lados.
Algunos de los síntomas son:
. Temblor en las manos, los brazos, las piernas, la mandíbula y la cara
. Rigidez en los brazos, las piernas y el tronco
. Lentitud de los movimientos
. Problemas de equilibrio y coordinación
Cabe señalar que por el momento no existe una cura para la enfermedad. No obstante, algunos tratamientos apuntan a mejorar los síntomas.
“En casos severos, una cirugía y estimulación cerebral profunda (electrodos implantados en el cerebro que envían pulsos para estimular las partes del cerebro que controlan el movimiento) pueden ayudar”, puntualiza Medline Plus.
