Arqueólogos de la Universidad de Tubinga (Alemania) dieron a conocer una positiva noticia, al confirmar que restos de un bastón arrojadizo encontrados en 2016, en el pueblo de Schöningen, fueron creados hace 300.000 años.

El objeto, hallado en las excavaciones de una mina, es un palo de asbesto de 64 centímetros y curvado, muy similar a los boomerang, aunque más rudimentario. Su uso habría estado ligado a la caza de animales, como aves y peces.

A través de un comunicado, los expertos indicaron que en el palo encontraron marcas de uso análogas a los pueblos originarios de Europa y Australia.

“Podemos comparar las marcas de impacto en el área central con los bastones arrojadizos de Australia y Tasmania. Esto nos dijo por primera vez para qué se utilizó el instrumento”, indicó el arqueólogo Nicholas Conard.

 Universidad de Tubinga
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De acuerdo a Conard, Schöningen es un lugar donde constantemente se han encontrado restos de civilizaciones antiguas; sin ir más lejos, a mediados de los 90 fueron halladas ocho jabalinas y lanzas del mismo material, las cuales se conocen como “lanzas de Schöningen”.

Todo aquello significaría que sus fabricantes son parte de la especie ‘Homo Heidelbergensis’, la cual es predecesora de los ‘Hombres de Neandertal’ y habría poblado la tierra entre 700.000 y 300.000 años atrás, aproximadamente.

Esta especie se caracterizó por utilizar un arsenal diverso y especializado en la caza, entre lo que se encontraban los bastones arrojadizos y lanzas de punta.

En este sentido el arqueólogo Jordi Serangeli, también de la Universidad de Tubinga, sostuvo que estos palos habrían tenido también una utilidad en la relación de los primeros humanos con los animales.

 Universidad de Tubinga
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“Son armas efectivas a diferentes distancias, entre otras cosas cuando cazan aves acuáticas. Además, es probable que el bastón se utilizara para sorprender y conducir hacia cierta dirección los mamíferos más grandes, como los caballos que a menudo se cazaban a orillas del lago Schöningen”, sostuvo.

Por último, los expertos sostuvieron que seguirán con las investigaciones en la zona del lago Schöningen, asegurando que la probabilidad de encontrar más restos de los Homo Heidelbergensis es bastante alta.

“Las posibilidades de recuperar objetos de madera al excavar sitios paleolíticos suelen ser insignificantes. […] El sitio de Schöningen proporciona las herramientas de madera paleolíticas y armas de caza más numerosas e importantes”, concluyó Serangeli.