En estas fechas muchos se trasladan con mascotas a su destino de vacaciones. La jaula debe quedar estable en el vehículo y permitir que el animal se pare, gire y acueste.
Viajar con un perro o un gato suelto en el vehículo, sentado junto al copiloto o en las piernas del conductor, son errores frecuentes al movilizarse con mascotas, por eso es importante saber cómo instalar una jaula de transporte, de manera correcta en el auto.
Especialmente cuando muchos se trasladan a su destino de vacaciones en el recambio de veraneantes, conoce también cuáles son las características que debe tener un Kennel o canil rígido.
¿Cómo colocar la jaula para mascotas en auto?
“Llevarlos sueltos (a las mascotas) es un gran riesgo, porque pueden distraer al conductor y causar un accidente, advierte Solange Ávila, médico veterinario de Drag Pharma.
“Frente un bocinazo, se puede alterar y tener una reacción violenta o ante una frenada brusca, el perro puede salir expulsado, golpeándose o causándole un daño”, agregó.
Por otro lado, si el perro saca la cabeza por la ventana, puede distraer a otros conductores. De ahí la importancia del uso de las jaulas de transporte, que permiten a las mascotas viajar más seguras.
Según Ávila, estos habitáculos deben ser fijados de manera estable en el vehículo, para seguridad de la mascota y los pasajeros, y evitar que salgan disparados como proyectil ante un movimiento brusco.
¿Dónde poner la jaula para mascotas en auto?
La mascota debería viajar en una jaula en el asiento trasero del auto, siempre enganchada con cinturón de seguridad.
Por eso, es muy importante que al comprar un canil, verificar que tenga enganches para los cinturones de seguridad. Esto evitará que en una frenada brusca salga disparada.
Si va en camioneta, el Kennel debe ir amarrado en la parte posterior que va descubierta.
En general, el medio de transporte de perro, gatos y otros, debe ir en un lugar del auto donde haya circulación de aire, para que respiren sin problemas.
¿Cómo escoger la jaula correcta?
Al escoger una jaula, Ávila explica que debe tener las dimensiones adecuadas para que la mascota se pare, gire y acueste. No es recomendable que sea de un tamaño muy superior a la mascota, pues el animal puede dar bote adentro y golpearse con el movimiento.
“Cuando la mascota está parada, debe existir un espacio de al menos 7 centímetros entre su cabeza y el techo, y otros 7 cm entre el cuerpo y las paredes de la jaula”, explica.
Además, es ideal elegir una jaula resistente, con puerta de metal, fijaciones y cierres seguros, y materiales de buena calidad. Así se reducirá el riesgo de que en situaciones de estrés el animal abra la jaula y escape.
Finalmente, la experta aconseja que la jaula tenga ranuras laterales que aseguren la adecuada ventilación interior para que el animal no sufra un golpe de calor.
