Hoy es el cierre de campaña de la segunda vuelta de gobernadores y en la región Metropolitana aumenta la tensión entre Karina Oliva (Comunes) y Claudio Orrego (DC).
Por ello, se espera un amplio despliegue para los distintos comandos.
Pareciera que en la región Metropolitana hay mucho en juego. Esto se deja ver en las críticas cruzadas entre los dos candidatos y sus conglomerados.
Ayer, la presidenta interina de la Democracia Cristiana, Carmen Frei, acusó agresiones e injurias por parte del Frente Amplio y los sectores que apoyan a Oliva, por una serie de críticas en redes sociales hacia Orrego.
El diputado de Acción Humanista, Tomás Hirsch, defendió a la carta frenteamplista, señalando que la exConcertación validó una serie de políticas que iban en desmedro de la ciudadanía, por lo que “le parece ridícula” la denuncia de la DC.
Hasta ayer, eran tres los precandidatos presidenciales de Chile Vamos que habían manifestado su apoyo a Orrego. Dicen en la interna que es una especie de “mal menor”, considerando el impacto que podría generar un liderazgo que provenga del Frente Amplio.
El cuarto respaldo al exintendente se sumó ayer y corresponde al ahora independiente Sebastián Sichel, quien si bien tiene una serie de roces con Orrego, planteó que no está dispuesto a votar por “extremismos”.
Hay voces de un sector de la oposición que señalan que este apoyo oficialista podría perjudicar a Orrego
