El excarabinero relató por primera vez públicamente su versión de los hechos ocurridos el pasado 2 de octubre de 2020, en el denominado Caso Pío Nono.

El día de ayer, y tras 5 meses en prisión preventiva, Sebastián Zamora, imputado por el homicidio frustrado de un joven de 16 años, pasó a arresto domiciliario total.

En conversaciones con T13, Zamora dio a conocer cómo se sintió ante la caída del joven de iniciales A.A.A. “al momento de caer, me causó un dolor interno. Jamás quise causarle ese tipo de daño a una persona. Yo lo iba a detener, iba a agarrarlo. En ningún momento quise empujarlo ni nada por el estilo”.

Durante ese viernes las manifestaciones se hicieron presentes en plaza Baquedano, y Zamora era parte de un piquete de 15 Carabineros que iban controlar a la multitud en el puente Pío Nono.

Al momento del incidente, el exuniformado había cumplido 8 meses como personal de Control de Orden Público de Carabineros.

Yo pensé en un momento que lo había matado, y por eso creo que estaba muy afectado, mi fin era detenerlo y no causarle mal a ninguna persona”, agregó.

Tras la caída, el joven de 16 años estuvo 6 días hospitalizado y tuvo que ser operado por fracturas en ambas muñecas.

“Mi jefe de sección lo único que intentaba era contenerme. Él es una buena persona y en ningún momento se me metió en la cabeza que me querían inculcar otro hecho“.

Por su parte, Michel Zamora, el padre del exfuncionario de Carabineros, afirmó que “han sido 5 meses difíciles, esperábamos este momento porque confiábamos totalmente en la inocencia de Sebastián (…) ahora hay que determinar qué pasó y establecerlo de manera científica”.

Para finalizar, Zamora aseguró que “me gustaría devolver el tiempo, y que las cosas fueras distintas. Tomar otras acciones en el momento”.