La Municipalidad de Buin rechazó la desvinculación de alrededor de mil trabajadores de la empresa Aconcagua Foods ocurrida el pasado 20 de febrero, como una manera de cumplir con los requerimientos de la Superintendencia de Medio Ambiente.
Lo anterior, luego que la entidad constatara que la planta de tratamiento de riles estaba operando por sobre la capacidad autorizada. El hecho había sido denunciado por el propio municipio y particulares, los que alertaron la presencia de malos olores.
El alcalde de Buin, Miguel Araya, lamentó la determinación y agregó que esto no soluciona los episodios de contaminación, los que muchas veces derivan en un menoscabo de la calidad de vida de los vecinos del sector especialmente durante la época estival, que es el período de mayor producción.
Asimismo, la autoridad comunal no descartó iniciar acciones judiciales en apoyo a los residentes que trabajaban en la empresa y fueron desvinculadas.
En tanto, fuentes de Aconcagua Foods señalaron a La Radio que la planta estaba funcionando de acuerdo a lo establecido en las certificaciones ambientales, por lo que el despido de los trabajadores se produjo como consecuencia de la disminución de la producción a niveles de invierno, es decir, fuera de la temporada alta.
Además, la compañía advirtió sobre una falta de disposición de las autoridades locales para desarrollar una mesa de trabajo de manera de elaborar medidas a corto plazo en beneficio de la comunidad.