Un sorprendido Joaquín Lavín llegó hasta el patio de una vivienda en la comuna de Las Condes para chequear lo que parecía ser un déjà vu: por segunda vez, un conejo mascota desenterró una pieza de artillería de guerra.

“Esta es Coni. Ella hizo un hoyo en este lugar y encontró un proyectil de unos 30 centímetros de alto por 10 centímetros de diámetro. Debe ser un proyectil muy antiguo porque estas casas se construyeron en la década del 60. Incluso es probable que esté desde antes”, aseguró en un video.

El alcalde de Las Condes indicó que debido a que la munición se encontraba “inestable”, un equipo del GOPE de Carabineros arribó al domicilio para retirarlo, y así ocuparse de su detonación o desactivación de modo seguro.

“Es increíble pero es segunda vez que me toca que un conejo en Las Condes descubra un proyectil enterrado”, sentenció Lavín, mientras observaba a Coni consumir un merecido premio en hojas de lechuga.

En efecto, fue en abril de este año que otro lepórido dio con una munición de guerra. En aquella ocasión se trató de un proyectil de ametralladora antiaérea Bofor, el cual, si bien tenía signos de haber sido percutado, también se trasladó a un recinto especializado para su verificación.