Personal de Fuerzas Especiales de Carabineros desalojó en horas de anoche a los sesenta vecinos de Ñuñoa que pernoctaban en un colegio exigiendo una solución habitacional en la comuna.

La decisión fue tomada por la Intendencia Metropolitana, ente que había advertido que tomaría otras acciones si los vecinos no se retiraban del establecimiento educacional Brígida Walker.

El desalojo se realizó sin violencia, ya que los manifestantes se retiraron en calma del lugar. Tras el actuar policial, algunos de ellos pernoctaron en la vía pública.

La situación comenzó en julio pasado cuando las familias llegaron hasta unas canchas de Ñuñoa, iniciando una toma de terreno que terminó el mes pasado, cuando los protagonistas de la toma fueron reubicados en el colegio antes mencionado.

Los integrantes del movimiento esperan que, con estas protestas, se les entregue una solución habitacional dentro de la misma comuna.

Personal de Carabineros se encuentra en las afueras del colegio Brígida Walker realizando una vigilancia para evitar una nueva toma.