La Intendencia Metropolitana decretó para este sábado la primera Alerta Ambiental de 2018. La medida fue realizada con motivo de proteger la salud de las personas de las malas condiciones de ventilación del aire presentes en Santiago.

Esta precaución fue adoptada luego de conocerse el informe entregado el viernes por la Secretaría Regional Metropolitana del Medio Ambiente, en el cual se pronosticó una alerta para MP2,5 con el objeto permanente de resguardar la salud de la ciudadanía.

El que no se haya anunciado restricción vehicular es preocupante, ya que desde hace dos días existe un peak de contaminación que ha estado aumentando, según explicó el presidente del Departamento de Medioambiente del Colegio Médico de Santiago, Andrei Tchernitchin.

El experto agregó que el error más grave fue no decretar medidas preventivas días antes, por lo que emplazó a la autoridad a establecer como medida permanente la prohibición del uso de estufas y cocinas a leña.

En tanto, la encargada de campaña de Greenpeace Chile, Estefania González, emplazó a la Intendencia Metropolitana a incentivar el uso del transporte público.

Según expertos ambientales, las autoridades deben adoptar medidas de prevención frente a estas alertas para evitar llegar a preemergencias, entre las que cuentan la restricción vehicular permanente a catalíticos de al menos 1 dígito.