Raúl Aravena Lisboa de 58 años y su hijo, Gustavo Aravena de 32, pasaron a convertirse de víctimas a victimarios tras el portonazo sufrido el pasado lunes, hecho que terminó con la vida de Juan Jorquera, joven de 27 años que robó el auto blanco Mitsubishi Lancer desde el domicilio de los ahora detenidos.

Pese a que no tenían antecedentes penales, sino más bien una irreprochable conducta anterior, la jueza del Juzgado de Garantía de San Bernardo acreditó un homicidio simple luego que el Ministerio Público expusiera sus antecedentes, entre ellos 3 testigos de lo ocurrido, considerándolos un peligro para la sociedad, por lo que ambos quedaron en prisión preventiva.

“A mi hijo le ganó la droga”

La madre del fallecido, más conocido como “Juanito”, Pamela Jorquera, relató a El Mercurio que su hijo tenía problemas de drogadicción.

Su hermana Verónica, quien es considerada como una segunda mamá del joven, entregó algunos antecedentes respecto a su familia y al difícil escenario por el que han pasado.

“Somos hijas de una familia mal constituida, con padre golpeador y alcohólico. Nos decían las huachas y todas terminamos estudiando y con sobrinos en la universidad. Juanito también tenía título (técnico eléctrico)”, sostuvo.

Pese a terminar sus estudios, el joven poco tiempo ejerció, ya que aseguran que le iba mejor vendiendo drogas.

En el año 2012 fue procesado por microtráfico, mientras que en 2014 fue internado en la comunidad terapéutica “Plenitud”, lugar donde duró poco tiempo debido a que Senda no renovó la licitación mediante la cual subsidiaban la atención de Juan. No terminó el tratamiento.

Tras lo ocurrido, su madre advierte a El Mercurio que a su hijo “lo utilizaron. No estuvo en el lugar que le correspondía. Las personas que andaban con él son los más delincuentes. Él estaba a las 7 de la mañana del lunes en la esquina de Yungay, en San Bernardo, y le dijeron vamos, te damos 20 lucas, y lo subieron al auto. Como él manejaba, lo utilizaron, y después lo abandonaron”.

A Pamela Jorquera le contaron que su hijo estaba muerto producto de lo que había salido en las noticias, ante ello sostiene que nadie le avisó bien de su deceso, ni la policía ni la Fiscalía. “A mi hijo le ganó la droga”, finaliza diciendo.

Familia Aravena Gallardo

Si bien tiene prohibido emitir declaración por consejo de su abogado, Nancy Gallardo, esposa y madre de los imputados, aseguró que su vida no ha sido fácil, “en la familia somos luchadores. Somos de mucho esfuerzo y no nos dejamos caer”.

Tras no quedar satisfecha la familia con el primer abogado y a su vez tampoco quien los representaba, el caso lo tomó un nuevo profesional, Matías Undurraga Palma, quien fue ofrecido por los empleadores de Gustavo Aravena tras quedar impactados con lo ocurrido.

Según indicó Nancy, el legista le explicó que su caso “ha estado sobreexpuesto en los medios, especialmente en la televisión, y eso nos perjudica. Este es un caso difícil (dijo el abogado) y primero tienen que estudiar bien la defensa”.

Consultada respecto a alguna dificultad de su hijo o esposo, fue enfática en señalar que ambos no tenían ningún problema grave. “¿Usted cree que alguno de los dos se levantó esa mañana pensando en matar a alguien? Ellos son personas buenas, responsables”, sostuvo. “El miedo, la rabia y el pánico… no sé. Dicen que mi marido tenía un palo y nunca apareció el palo”, remató.

“Siempre han sido tranquilos, gente de trabajo”, finalizó diciendo Nancy.

Cabe estacar que la Fiscalía tendrá un plazo de 60 días para investigar lo ocurrido.

Este artículo describe un proceso judicial en curso
Existe la posibilidad de que los cargos sean desestimados al finalizar la investigación, por lo cual NO se debe considerar al o los imputados como culpables hasta que la Justicia dicte sentencia en su contra.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)