Comienza la cuenta regresiva para adjudicar las obras que completarán el puente Bicentenario, licitación del MOP en la que compiten tres empresas.
El proyecto, sin embargo, está amenazado por familias que se niegan a dejar su viviendas, ubicadas en la faja del viaducto que conectará el puente con la avenida Chacabuco.
Actualmente avanza el despeje y la habilitación del terreno necesario para estas obras, esperándose que su término coincida con la adjudicación de la licitación para dar término al puente Bicentenario, cuya construcción comenzó hace 10 años.
El seremi de Obras Públicas, Víctor Reinoso, explicó el cronograma, que incluye la adjudicación de los trabajos en cualquier momento a partir de este miércoles.
En el intertanto se mantiene el conflicto a raíz de las siete familias que se niegan dejar sus casas, ubicadas en la faja por donde cruzará el viaducto que conecte el puente y que tiene un presupuestos de más de 24 mil millones de pesos.
Al respecto, la abogada Paula Villegas recordó que el caso de sus clientes fue judicializado por el Serviu, pero también por ellos, al presentar una denuncia en el Tribunal Ambiental.
La pugna tiene que ver con el rechazo a la relocalización, por lo que el Serviu pidió al justicia civil el desalojo de las familias, lo que debería ser resuelto antes de que comiencen las obras, señaló el director Samuel Domínguez.
En caso de no concretarse el desalojo, el MOP tiene como alternativa el inicio de los trabajos alrededor de los inmuebles y así dar inicio definitivo a la última etapa del puente Bicentenario, el que se espera sea inaugurado a fines de 2023.
