"Desde mi impresión, ella está disfrutando de su encierro más de lo que yo estoy disfrutando mi libertad", reflexionó el joven.

La mañana de este lunes, Alejandro Villegas, hijo del profesor Nibaldo, quien fue asesinado en 2018 por Johanna Hernández y Francisco Silva, se refirió a los cobros de bonos covid e IFE por parte de la mujer, quien actualmente purga una pena de presidio perpetuo calificado.

En conversación con Buenos Días a Todos, el joven contó que advirtió la situación hace algunos meses, cuando quiso comprobar si podría acceder a alguna ayuda estatal en medio de la pandemia.

El joven, que estudia, trabaja y se transformó en padre hace un tiempo, descubrió que efectivamente le correspondían los beneficios, pero que todos ya estaban cobrados.

Eso llevó a una conversación familiar con lo cual el clan se enteró que Hernández, desde la cárcel, ha recibido todas las transferencias.

“Ella asesinó a mi papá y ahora más encima está reuniendo fondos, ganando plata, a costa mía y de mi hermana”, dijo Villegas, quien cifró en un más de $1 millón de pesos el total que Hernández ha recibido.

“Ya me quitó a mi papá, parte de mi alegría, y me puede seguir quitando porque nadie me asegura si esos dineros que le llegaron me los van a devolver o se los van a dar a mi hermana”, lamentó Villegas.

“Me da impotencia, rabia. No me cabe… no me calza. ¿Cómo el Estado la sigue ayudando? ¿No tiene conocimiento a quiénes les está prestando ayuda?”, inquirió.

“Ella sigue viviendo su vida y está más tranquila que nosotros”, añadió Villegas al matinal de TVN.

Aunque afirmó que nunca esperó recibir alguna ayuda, el joven aclaró que los dineros cobrados por la condenada le habrían ayudado a solventar algunos costos.

Por ejemplo, para poder matricularse este año académico, tuvo que pedir dinero prestado. “Esta ayuda habría sido incluso un impulso anímico”, aseveró.

En el contacto, Villegas recordó que tras el juicio Chile comenzó a hablar de justicia en este caso, pero criticó que después de todos estos años siga “habiendo injusticias”.

“Par mí es algo ilógico, irresponsable. Al final, por lo que yo sé, tener dinero en un centro de reclusión te da un estatus, entonces por favor… ¿cómo le van a estar dando dinero a ella?”, complementó Villegas.

“Desde mi impresión, ella está disfrutando de su encierro más de lo que yo estoy disfrutando mi libertad”, reflexionó el joven.