La familia de un exoficial de la PDI que perdió la vida en abril pasado interpuso una querella por el delito de obstrucción a la investigación.

Lo anterior, luego de criticar la tesis que arrojó las primeras pericias sobre el deceso del joven, la que apunta a un suicidio.

Se trata del caso de Francisco Gutiérrez de 29 años, quien fue encontrado sin vida en cercanías de la Avenida Sporting de Viña del Mar, el que acuerdo a declaraciones que emitió la policía civil -en aquél entonces- se habría disparado, tesis con la que no concuerdan ni sus familiares ni sus cercanos, ya que aseguran que él no tenía motivos para tomar dicha decisión.

Además, indicaron que las pericias que ha realizado la institución desde esa fecha han sido negligentes y no concordantes, tanto con las horas, como también con la situación en la que se dio el supuesto suicidio.

Daniela Ruiz-Tagle (RBB)
Daniela Ruiz-Tagle (RBB)

Patricio Olivares, abogado representante de la familia de Gutiérrez, indicó que la querella es contra de todo el personal de la Policía de Investigaciones que resulte responsable, tanto como autores, cómplices o encubridores.

Además, dijo que en agosto pasado aparecieron nuevos antecedentes que permitirían presumir que incluso existiría participación de terceras personas.

Dentro de las dudas que tiene la familia y que están presentes en la querella, está el presunto consumo de alcohol por parte de Francisco horas previas a su muerte, algo que habría sido declarado por testigos luego de un asado.

Sin embargo, la parte querellante indicó que el informe de alcoholemia realizado a poco menos de un mes de lo ocurrido arrojó 0.

Jorge García, vocero de la familia y también amigo del fallecido, apuntó que las interrogantes nacen por el poco protocolo que – a su parecer- ha tenido la institución policial, expresando que tampoco hay concordancia con ciertas declaraciones presentes en la carpeta investigativa.

Flaminga Olaza, madre de Francisco, afirmó que su hijo no tenía razones para quitarse la vida, ya que jamás presentó rasgos de depresión, describiéndolo como una persona muy alegre y rodeada de amigos.

Debido a esto, Olaza descartó de raíz la tesis de suicidio, señalando que como familia se enteraron del hecho después que saliera en la prensa.

De acuerdo a los antecedentes, quien resulte autor, complice o encubridor del delito de obstrucción a la investigación podría ser sancionado con la pena de presidio menor en su grado mínimo y una multa de dos a doce unidades tributarias mensuales.

En un escueto comunicado, la Policía de Investigaciones apuntó que “el Ministerio Público instruyó que la Brigada de Homicidios de Valparaíso adoptara las primeras diligencias en el sitio del suceso y posteriormente, emitió una orden de investigar en una causa que aún se encuentra abierta”.

De forma paralela, indicaron que instruyeron los actos administrativos correspondientes, los que se encuentran aún en etapa investigativa.