El Departamento de Bienes Municipales de Valparaíso insistió en que los ascensores de la ciudad puerto siguen sin recibir recursos económicos por medio del Fondo de Apoyo a Regiones (FAR), a pesar de ser considerados como un medio de transporte público desde 2015.
Son cerca de 20 mil millones de pesos los que se invierten en la región de Valparaíso por medio de la conocida Ley Espejo del Transantiago, para mejorar el sistema de transporte que opera en las 32 comunas de la zona.
Gloria Hutt, ministra de Transportes y Telecomunicaciones, planteó que los reglamentos emanados por Contraloría la semana pasada no dan el carácter de medio de transporte publico a los ascensores de Valparaíso.
Los comentarios de la secretaria de Estado fueron criticados por Pedro Pablo Chadwick, jefe de Bienes Municipales de Valparaíso, quien dijo que ya se había acordado con el ministerio la condición de los elevadores de la ciudad puerto, y que todo este tiempo solo ha faltado que esto se confirme.
Además añadió que hoy en día los ascensores de Valparaíso no reciben los recursos que entrega el ministerio de transporte a través del Fondo de Apoyo a Regiones.
Según Marco Brauchy, quien es parte de la Corporación de Turismo del Gobierno Regional y de la Corporación Municipal de Valparaíso, desde 2015 los ascensores pueden recibir dineros de este fondo. Sin embargo, aclaró que también faltan estudios para definir cuáles son los niveles de financiamiento que requieren para operar.
“Tienen categoría de transporte público, serían beneficiarios de poder acceder a algún tipo de subsidio a través de ese financiamiento específico. No hay ningún estudio que permita aseverar cuál es la cantidad de recursos que requiere cada ascensor”, explicó.
Brauchy también apuntó a que tampoco existen estudios que conozcan en el Consejo Regional, para poder definir la administración y la entrega de dineros a quien termine operando los elevadores.
El debate se mantiene durante la misma semana en que inició el acceso liberado a los elevadores de la ciudad puerto para las personas de la tercera edad y estudiantes de enseñanza básica, medida impulsada para mitigar los gastos de la locomoción colectiva que deben realizar los adultos mayores y alumnos de la comuna.
