Juan Carlos Oróstica, presidente de Animalex, calificó como “una burla” la determinación del municipio de Viña del Mar de realizar una consulta ciudadana para definir destino de los coches victoria.
La medida, dijo, junto con ser una estrategia para no hacer ruido en periodo de campaña, endosa a la comunidad una obligación que es del municipio. Lo que se debió hacer, considera, es terminar con esta actividad, tal como lo sugirió Contraloría Regional.
La medida es parte de los acuerdos que han salido a la luz en la mesa que conforma el municipio y los cocheros, conversaciones que aún no decantan, pese a que este martes se cumplía el plazo que en principio había dado el municipio para dar fin a este transporte turístico.
Hugo Espinoza, quien representa a la parte municipal en esta mesa, dijo que los acuerdos adoptados formarán parte de una ordenanza que aun no esta aceitada y que debe ser aproada por el concejo, lo que debería ser resuelto, estima, en el mes de septiembre u octubre.
Respecto a la consulta ciudadana, señaló que esta podría realizarse el primer semestre de 2017, pero eso deberá ser definido por las nuevas autoridades que compongan el Concejo Municipal.
En cuanto a los acuerdos que se evalúan, en el marco de propuesta para la modificación de la ordenanza, se considera ademas el cambio de trazado que no incluiría a avenida Libertad, pero sí contemplaría puntos turísticos importantes, como el Museo Fonck, el Palacio Rioja, un circuito corto por avenida Perú y la población Vergara, para sólo atravesar avenida Libertad.
Al mismo tiempo, se analiza que los coches tengan restricción de uso y dejen de operar todos los mismos días; asignando turnos, donde sólo 20 coches puedan salir a circulación por jornada.
