En una nueva jornada del juicio oral por el crimen de la pequeña Sophie en Puerto Montt, la directora del Cesfam donde fue atendida la niña, relató que la víctima tenía claros signos de estrangulamiento. En tanto, la familia del Francisco Ríos -único imputado- aún señala que es inocente.
Este caso se investiga desde el 25 de enero de 2018 y tras el inicio del juicio, han declarado en la Segunda Sala del Tribunal Oral en Lo Penal de Puerto Montt, peritos, paramédicos y el propio imputado.
Según indicaron desde Fiscalía, las diligencias dan por acreditado que Francisco Ríos, tras varios días de agresión, mató a su hija que estaba por cumplir los dos años de edad.
Paula Brevis, directora del Centra de Salud Familiar de Alerce, lugar a el imputado traía en sus brazos a la pequeña con distintas lesiones. Así relató que al momento de atenderla, encontraron signos de estrangulamiento.
“La recibimos fallecida, inconsciente por más de 30 minutos”, señaló la mujer indicando que se realizaron las maniobras de reanimación y tras constatar la muerte notaron los diferentes signos de violencia y tortura.
Un primo de Francisco Ríos, señaló que como familia mantienen la postura de apoyo incondicional, refiriéndose que además, mencionó que la madre ha cambiado la versión de los hechos. “El dio una declaración en esa instancia y se ha mantenido, no hay una mentira acá”, indicó el familiar.
El hombre además indicó que los padres del acusado debieron irse de la casa donde ocurrieron los hechos el mismo día en que Ríos fue formalizado por temor, ya que recibieron múltiples amenazas.
Esta cuarta jornada de juicio estuvo marcada por la presencia de algunos miembros del círculo cercano a Francisco Ríos y un perito.
