Durante la jornada de este martes seis presos mapuche que se encuentran internos en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Temuco emitieron una declaración donde presentaron el eje de sus demandas, hecho que se genera en medio de huelgas de hambre.
En el texto demandan “territorio y autonomía para la nación mapuche”; desprocesamiento de todos “luchadores mapuche”; “libertad (…) a todos los presos políticos mapuche”; y “desmilitarización” de la zona.
Se trata de Daniel Canio Tralcal, Fermín Márquez Inal, Cristopher Pino Curin, Víctor Marileo Ancapi, Jose Caceresn Salamanca y Facundo Jones Huala.
El grupo detalla que asumen “la huelga de hambre como una trinchera de lucha desde las cárceles, aclarando a su vez que nuestra huelga y movilización es política y por las grandes demandas de nuestro pueblo”.
“En el marco de este conflicto es que los Estados, representados por distintos gobiernos, no han dudado en ponerse fielmente al servicio del empresariado y han buscado de distintas maneras asumir el conflicto en contra de nuestro pueblo, conflicto que ya se arrastra hace más de dos décadas, a través de la cooptación, integración, infiltración, militarización y cárcel en contra de aquellos que no hemos tranzado con la línea de la reconstrucción de nuestro pueblo nación mapuche, aplicando toda la rigurosidad de sus leyes, técnicas represivas y, muchas veces, sobrepasando su propia institucionalidad para mantener en prisión a nuestra gente. Es por todo lo anterior que nos reivindicamos como presos políticos mapuche”, sostienen.
En esa línea, agregan que “la reconstrucción nacional mapuche se consigue con lucha, sabotaje y con nuestras propias prácticas y línea propia, no al lado de la institucionalidad ni de sectores que hoy tratan de ponerse al frente de nuestras demandas”.
Añaden que dichos sectores “cuando fueron gobierno, no hicieron más que perseguirnos, encarcelarnos y ponerse de rodillas frente al empresariado. Por esto mismo es que llamamos a nuestra gente a no continuar recibiendo migajas. Nuestra demanda es clara y el Estado debe devolver lo usurpado, retirarse en conjunto con el gran empresariado que tiene en sus manos nuestras tierras, y que, gracias a la prensa burguesa son omitidos como parte primordial de este conflicto”.
“Las empresas capitalistas (forestales, hidroeléctricas, latifundio y demás intereses del gran capital) son nuestros verdaderos enemigos, no así el ciudadano común, el poblador no mapuche, los trabajadores y campesinos pobres”, aseguran.
Finalmente, señalan que “como presos políticos mapuche, somos fieles militantes de la lucha autonomista, miembros de lof, comunidades y organizaciones que, desde afuera, continúan luchando en contra principalmente de las forestales”.
“Sus principios y ética nos rigen, por lo anterior es que reivindicamos la violencia política como forma legítima de resistencia y autodefensa al capitalismo extractivista, eso sí, respetando la vida de la gente a quienes el empresariado y el Estado utiliza como chivo expiatorio para sustentar el supuesto terrorismo y acusaciones en contra de nuestro pueblo”, adujeron.
